• Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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Israel prohíbe a un hombre donar su semen por ser "ilegal", se le contabilizan 33 hijos en diferentes continentes

El gobierno de Israel prohíbe a un hombre donar su semen a mujeres de varios continentes que deseen quedar embarazadas. En el país no está prohibida la donación siempre y cuando sea anónima. Se estima que es padre de al menos 33 hijos.

Ari Nagel, 'El esperminador', en una imagen de Facebook.
Ari Nagel, 'El esperminador', en una imagen de Facebook.
Israel prohíbe a un hombre donar su semen por ser "ilegal", se le contabilizan 33 hijos en diferentes continentes

Ari Nagel, de 24 años de edad, tiene prohibido que done sus espermas a las clínicas de fertilidad en Israel  ya que el Ministerio de Salud de ese país cree que es ilegal y no se ha apegado a las leyes. Nagel obtuvo su fama y fue nombrado “El esperminador” ya que ofrecía gratuitamente su semen para ayudar a las mujeres que quisiera quedar embarazadas ya que para estas él era considerado como  el “padre ideal”.

El periódico español El País  se contactó con él para saber su opinión y dijo “Nunca acepto dinero a cambio pero algunas me ayudan a costear el billete de avión para cumplir su sueño. Prefiero ser recompensado con muchos besos y abrazos”.  Muchas de las mujeres que lo contactan son afroamericanas, europeas y asiáticas.

Para el hebreo donar sus fluidos es una misión  en la vida ya que lo ha llevado a recocer el mundo y ahora es padre de 33 niños, uno de ellos nació el mes pasado. “Hay otros 10 en camino. El próximo nacerá en agosto en Taiwán”, reconoce.

En 2017, Nagel regresó tre veces a Israel con el propósito de dejar semillas en su tierra natal sin embargo, las autoridades de ese país han sepultado las ganas del hombre por embarazar a una mujer hebrea. No tiene sentido que Israel prefiera que las madres compren esperma no judío fuera”, se lamentó con El País.

El padre de 33 hijos  fue criado en una familia judía ultraortodoxa en el condado Rockland, en Nueva York, donde se convirtió en profesor de matemáticas en la Universidad de la Ciudad de Nueva York. Nagel tiene tres hijos de su matrimonio con una mujer judía religiosa, ella se separó de él por desaprobar lo que hace. “Conozco el drama por el que pasan las mujeres que quieren ser madres. Para mi es tan sencillo ayudar que me resulta muy difícil decir que no”, explicó.

En Israel la donación de semen está permitida si se realiza de forma anónima o si el donante firma un documento por el que se compromete a asumir sus obligaciones como padre. El problema de El esperminador es que, en Israel, la donación está limitada por ley y Nagel, además de tratar de satisfacer todas las peticiones, habría firmado ese documento de paternidad con siete israelíes.  

El Director de la Unidad de Infertilidad de Centro Médico Assaf Harofeh, Ido Ami, señaló que en ese unidad está congelado el esperma de Nagel sin embargo cuando ellos preguntaron al ministerio público de salud ellos les dijeron que no se podía “utilizar ese esperma es ilegal”.

Las futuras receptoras pagan unos 1.000 euros a la clínica para conservar el esperma un año. “Les devolvieron el dinero. Descartaron la muestra alegando la ilegalidad del proceso”, aseguró Nagel.

“Tengo 15 hijos con lesbianas pero también he ayudado a transexuales y heterosexuales”, reconoce a sabiendas de que, en algunos países, ha cruzado la línea roja legal.

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