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Judiciales - A LA ESPERA DE AUDIENCIA

Ingeniero en sistemas es acusado de haber utilizado la firma y sello de un abogado suspendido para cobrar por trámites

El acusado ocupaba la firma y el sello de un abogado que fue suspendido en el mismo año que este comenzó a estafar a las personas. Las víctimas por su parte no se dieron cuenta de los sucedido hasta que personal de SERTRACEN le dijeron la verdad. 

Estafa
El verdadero dueño de la firma y el sello era de un abogado que fue suspendido en 2014.
Ingeniero en sistemas es acusado de haber utilizado la firma y sello de un abogado suspendido para cobrar por trámites

Un ingeniero en sistemas es acusado de haber utilizado el sello y la firma de un abogado fuera de ejercicio para cobrar por los servicios que ofrecía en una oficina tramitadora ubicada en el municipio de Ilopango.

La investigación de las autoridades señala que Hernán H. montó una oficina en la que cobraba $15 por cada compraventa que le era solicitada por Ley para adquirir vehículos. De momento hay cuatro casos judicializados que pesan en su contra.

El expediente judicial, señala que el primero de los casos se dio el 19 de noviembre del 2014 cuando Sonia (nombre modificado por seguridad) se acercó a un autolote en San Rafael Cedros, Cuscatlán, para adquirir un vehículo.

En ese lugar estaba Catalina O. quien le recomendó presentarse a la tramitadora de un socio de ella que se ubicaba a media cuadra de la aduana en San Bartolo, en Ilopango para proceder con el negocio que quería realizar.

Atendiendo la recomendación, la víctima se presentó al día siguiente al establecimiento de Hernán quien brindó sus servicios, no obstante a Sonia le pareció extraño que el imputado imprimiera la firma y el sello y que solo pusiera sus huellas dactilares en el documento.

Pese a estar extrañada de lo ocurrido, la víctima no preguntó nada y terminó cancelando la tarifa establecida por el falso abogado quien a diario recibía múltiples clientes por su estratégica ubicación.

El relato de los otros tres casos es similar, todos coinciden en que Hernán no estampaba ni la firma ni el sello en esta oficina que identifican por ser la de "una pared pintada de celeste sin tener rótulo".

El imputado quedó en evidencia cuando las víctimas se presentaron en Sertracen para culminar la transacción de los carros que habían comprado. Los empleados del lugar les señalaron que el trámite era improcedente debido a la compraventa.

Según los registros de Sertracen, la firma y el sello plasmados en el papel no correspondían al supuesto abogado. Los empleados señalaron que esas marcas eran de otro abogado que fue suspendido en 2014.

La ilegalidad los documentos obligó a los afectados a invertir más tiempo y dinero para legalizar los vehículos que compraron, por lo que decidieron interponer una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR).

En la acusación presentada contra Hernán se le imputan los delitos de falsedad material y estafa en contra de las víctimas. El caso es llevado por el juzgado Tercero de Sentencia de San Salvador quien prevé una audiencia de vista pública para en noviembre de este año.

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