La embajadora de Estados Unidos en El Salvador, Jean Manes, reclamó a las miles de personas que han tenido sospechas de desvío de dinero en los últimos periodos presidenciales y se quedaron callados, mostrando su indignación hasta hoy que se dan a conocer.

"Ahora la población está indignada con el nivel de corrupción pero también tengo que preguntar ¿dónde estaba toda esta indignación hace quince años? ¿Hace doce años? ¿Hace diez años? ¿Hace cinco años?", manifestó la diplomática.

"Esta indignación sobre cómo miles de personas sabían sobre lo que estaba pasando en este país. Es un país pequeño, en donde había movimientos de este monto de dinero. Esto no es un secreto de estado. No era un secreto de estado. Habían miles de personas disponibles de mirar en la otra dirección sabiendo lo que estaba pasando en este país", agregó.

Manes puso como ejemplo las recientes adquisiciones que han realizado funcionarios públicos a quienes nadie les cuestiona sobre la forma en la que han obtenido el dinero con el que han comprado fincas de café.

"¿Cómo consiguió un funcionario público esta cantidad de dinero para comprar este terreno? ¿Por qué no estamos haciendo esta pregunta hoy en día? En vez de esperar quince años más adelante, y depender únicamente de una parte de su sistema judicial, que prácticamente tiene toda la responsabilidad para todo este país", señaló.

"Deberíamos preguntar por qué esta persona está comprando este coche de lujo. O esta casa en la playa. Pero miles de personas están dispuestas a participar de una forma en esta venta. No se puede. Si quiere cambiar su país y seguir adelante el momento es ahora y está en sus manos", continuó.

Manes también valoró que "todas las entidades gubernamentales relevantes como la Fiscalía General de la República, la Superintendencia del Sistema Financiero y la Corte Suprema de Justicia deben estar plenamente comprometidas. La lucha contra la corrupción y el lavado de dinero requiere de estrategias efectivas para procesar y llevar ante la justicia a los presuntos responsables".

La complicidad de los partidos

Por diferentes razones y en varios momentos de la reciente historia democrática del país, dirigentes del FMLN y ARENA han permitido que los expresidentes señalados por casos de corrupción hayan cometido los hechos.

Luego de la muerte del expresidente Francisco Flores, dirigentes de ARENA aceptaron que parte del dinero que se le cuestionaba en el proceso judicial fue a parar a las arcas del partido, pero alegaron que por no tener control financiero no tuvieron claro la procedencia del dinero.

Misma situación es la que actualmente alega Mauricio Interiano quien explicó que en la  contabilidad del partido no se reflejan los más de $7 millones que el peritaje financiero determinó que Antonio Saca entregó al partido tricolor.

Jorge Velado, quien fue presidente de ARENA, manifestó que cuando llegó a la dirigencia del partido encontró un desorden administrativo y que cuando vio la mansión que el expresidente se construyó surgieron sospechas, más nunca presentaron avisos a las instancias correspondientes.

Velado alegó que solo se mantenían en rumores de que se estaba teniendo un mal manejo de los fondos públicos, pero no que hayan ingresado de esos fondos del Estado. Incluso, dijo en varias ocasiones se le dijo al exfiscal, Luis Martínez, sobre aviso de la situación, pero este “escondió” el caso.

En el caso de la izquierda, el secretario general del Frente, Medardo González, reveló que fueron ellos quienes le sugirieron a Mauricio Funes abandonar el país y buscar asilo político en Nicaragua ya que consideraron que había personas que querían ver humillado al expresidente.

"Te pueden capturar e iniciar un proceso para condenarte mediáticamente y humillarte ante la población", fueron las palabras que González le dijo a Funes quien ha sido señalado de apoderarse de $350 millones.

"No vamos a mantener actitud distante solo porque él está bajo una tormenta", subrayó el dirigente farabundista quien fue el que buscó a Funes para proponerle la candidatura presidencial en las elecciones de 2009.