Una discusión marital de más de 18 horas, llevó a Elmer Blanco y a su esposa a los tribunales para esgrimir un caso por del delito de expresiones de violencia contra la mujer, luego que él le dijera en repetidas ocasiones que era una basura y que no servía para nada.

La discusión inició en la casa de ambos en urbanización Madre Tierra, de Apopa, a las 2 de la tarde del 9 de octubre de 2016 y se prolongó hasta las 9 de la mañana del día siguiente, cuando su esposa logró llamar a la Policía y denunciar las agresiones verbales del sujeto.

Según confesó el mismo imputado, en la discusión insultó a su esposa diciéndole que era una basura y que no servía para nada. Además, de echarla de la casa porque estaba harto de que viviera con él y sus hijos. En pleno juicio, Blanco le pidió perdón a su esposa y dijo estar arrepentido de esos hechos.

“Ni quisiera acordarme de todo eso. Estoy arrepentido de haberla tratado de esa manera”, dijo en el estrado frente al juez del Tribunal Quinto de Sentencia de San Salvador. Por esta confesión, el juzgador aprobó que se ventilara el caso bajo un proceso abreviado y así el imputado podría tener una menor pena.

La víctima estuvo de acuerdo y pidió al juez exigirle a su ex pareja que no se le volviera a acercar y que le diera el divorcio. 

En este sentido, el juez condenó al sujeto a pagar $300 por el delito y, además, ordenó que no se le acercara a la víctima y que de ser necesario buscara otro lugar donde vivir, ya que viven cerca y la víctima debe pasar cerca de la casa del imputado cada vez que sale.

Asimismo, le pidió colaborar con dar la firma de divorcio.