José Raúl Salazar y Rosa María Romero de Salazar, como representantes de la empresa Salazar Romero, fueron enviados a juicio, pues se les acusa de haber desalojado de manera indebida a una familia de la Residencial Metrópolis San Gabriel en 2014.

La jueza del Juzgado Quinto de Instrucción determinó que, de todos los acusados por este delito, solo para estos dos hay pruebas de individualización. A los demás decidió sobreseerlos.

Ambos delegados de la empresa continúan con medidas sustitutivas a la detención.

La jueza anunció que son admitidos los 42 testigos que la Fiscalía y la querella han presentado y además redujo las 191 pruebas documentales que fueron presentadas, pues algunas se encontraban por duplicado.

A los representantes de la empresa constructora, se les acusa por los delitos de allanamiento de morada, ejercicio violento del derecho y daños agravados.

Según la acusación fiscal, la noche del 6 de octubre de 2014 los cuatro miembros de la familia Paz Juárez llegaron a su casa en la noche en el cluster 7, polígono 1, de la mencionada residencian ubicada en carretera a Quezaltepeque.

Al intentar abrir la puerta, la llave no respondía, mientras algunos vigilantes estaban en los alrededores inspeccionando la llegada de la familia. Luego de varios intentos para intentar abrir, uno de los vigilantes se acercó a Nery Juárez y le expuso que tenían orden de no dejarlos entrar a la casa y que incluso habían cambiado la chapa para evitar el ingreso.

Luego de intentar resolver el impase con varios de los encargados de la residencial, ninguno pudo resolverles. Así, es que junto a su esposo y sus dos hijas decidieron irse a dormir donde un familiar.

A la mañana siguiente, a eso de las 4 de la tarde, llegó un cobrador al trabajo de los esposos y le dijo que la casa había sido recuperada y que sus cosas personales habían sido llevadas a las bodegas de Salazar Romero.

Corrieron a la casa y la mayoría de sus muebles y objetos personales ya no estaban en el inmueble. Justo en ese momento,  interponen una denuncia y llegó la Policía a verificar. Horas más tarde, las cosas de la familia Paz Juárez aparecieron frente a la empresa propiedad de ambos. 

La Fiscalía describe que las cosas yacían tiradas frente al portón principal y que además llovía, por lo que muchas se arruinaron.

Por estar en mora

Por esa acción, los procesados en este caso son David Alexis García Rodríguez, Roberto Antonio Menjívar, Mario Orlando Juárez Echeverría, Carmen Salazar Landaverde, Rosa María Romero de Salazar y José Raúl Salazar Landaverde, todos representantes de la Sociedad Salazar Romero.

A criterio de la Fiscalía, ellos habrían participado con  distintos grados de responsabilidad para allanar la vivienda propiedad de la familia Paz Juárez, sacar sus objetos personales y dejarlos a la intemperie frente a la empresa propiedad de la familia.

Sin embargo, los ofendidos están conscientes que tenían una mora de tres meses con la empresa Salazar Romero por la venta de la casa. 

La razón es que la casa comenzó a presentar graves daños y un deterioro acelerado de las paredes, de los pisos y de varios de los acabados. La familia Paz Juárez se acercó a los representantes para que les resolvieran y repararan la vivienda. En algunas ocasiones, la empresa les colaboró con las algunas reparaciones, pero los daños volvían a presentarse. Por esa razón, los esposos Paz Juárez decidieron que no pagarían más hasta que las reparaciones se hicieran.

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