• Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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Sucesos - La nueva directora es Irma Flores

SECULTURA mintió: Director de Patrimonio Cultural sí renunció después de permiso a Bukele para construir en predio histórico

El director de Patrimonio Cultural, Marlon Escamilla, renunció el pasado viernes a Secultura en desacuerdo por haber cedido la institución a las presiones del alcalde Nayib Bukele, de remodelar 3 plazas que podrían dañar por siempre un importante predio histórico.

Silvia Elena Regalado
SECULTURA mintió: Director de Patrimonio Cultural sí renunció después de permiso a Bukele para construir en predio histórico

Tal como lo confirmó Diario El Salvador Times el pasado viernes, el director de Patrimonio Cultural, Marlon Escamilla, interpuso su renuncia ese mismo día, sin embargo, nuestra nota fue desmentida a través de un comunicado por la secretaria de Secultura, Silvia Elena Regalado.

Basados en fuentes fidedignas, este Diario publicó la información luego de haber hecho las consultas respectivas, y se le volvió a consultar a la secretaria quien una vez más negó la versión. Pese a ello, este lunes se supo que la nueva directora será la arquitecta Irma Flores.

Escamilla puso su cargo a disposición por desacuerdos con las máximas autoridades de Secultura, luego que cedieran a las presiones del alcalde capitalino Nayib Bukele, quien amenazó con demandar a la institución por $14 millones si impedían continuar con la remodelación de 3 plazas del Centro Histórico.

“Desde 1539 un solo predio de la antigua villa de San Salvador ha permanecido fijo, con muchos cambios de fisonomía y nombre. Fue Plaza del Ayuntamiento, Plaza del Cabildo, Plaza de la Independencia, Plaza de Armas, Parque Dueñas y ahora la llamamos Plaza Libertad”, documentó el historiador Carlos Cañas Dinarte en un artículo publicado el pasado fin de semana en la revista Factum.

Dicha Plaza se encuentra en la actualidad intervenida por la alcaldía de San Salvador para hacer mejoras, aunque el proyecto ha obviado posibles daños patrimoniales.

El alcalde Bukele ordenó hace una semana militarizar la zona con un numeroso grupo de agentes del CAM para impedir que los antropólogos y especialistas de Secultura ingresaran a hacer estudios en el terreno.

Bukele: "No pararemos ni aunque ahí esté enterrada la tumba de Atlacatl"

El edil capitalino dijo a El Salvador Times no estar dispuesto a ceder "ni un milímetro" en cuanto a parar las obras, argumentando que los permisos ya están dados y que hay compromisos adquiridos con los bancos, constructores, instituciones y otros. "No pararemos ni aunque ahí esté enterrada la tumba de Atlacatl", manifestó.

Según información de personas allegadas a Secultura, luego de las amenazas de Bukele, la secretaria Silvia Elena Regalado y otros funcionarios fueron llamados a Casa Presidencial a una reunión en la que los secretarios Hato Hasbún y Roberto Lorenzana, le ordenaron a Regalado no interrumpir los trabajos de la alcaldía de San Salvador, a lo cual aceptó dócilmente, no así Escamilla quien interpuso su renuncia.

Secultura nombra a Irma Flores

Ante la renuncia de Escamilla, Secultura nombró como directora de Patrimonio Cultural a la arquitecto Irma Flores, quien fue jefa del departamento de Zonas y Monumentos Históricos, que ahora es el departamento de Inspecciones de Bienes Culturales Inmuebles.

“Continuaré con la línea de trabajo que tiene actualmente la administración de la secretaria de Cultura, Silvia Elena Regalado”, detalló la nueva funcionaria.

Sobre la renuncia del antiguo director, Secultura se limitó a decir que "el nombramiento... se debe a la renuncia del maestro Marlon Escamilla al cargo. Marlon Escamilla renunció por razones profesionales. Las puertas de Secultura siguen abiertas para él”, manifestó Regalado.

Cañas Dinarte propone en su artículo: “Ojalá en esta ocasión, la prepotencia, el cemento y la maquinaria pesada no nos impidan conocer más de nuestra historia. En 1994 perdimos los vestigios de la capital del señorío pipil y no tuvimos ocasión de conocer más de esa civilización que floreció en las orillas de la laguna de Antiguo Cuscatlán. Ahora es cuando debemos rescatar lo que podamos de la herencia capitalina que aún tenemos y lo que desconocemos, porque yacen entre 50 centímetros y 5 metros bajo nuestros pies, pero mucho más lejos de nuestros ojos y mentes.

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