La visita de Ronaldinho en El Salvador no llenó las expectativas de algunos aficionados del brasilero, quienes en redes sociales externaron su malestar con la empresa que organizó los eventos en los que estuvo presente el exfutbolista.

En redes sociales se ha viralizado la denuncia de una usuaria identificada como Naty Molina, quien asegura sentirse estafada al pagar $225 por una actividad que se ofreció como un campamento para niños y jóvenes y terminó siendo un convivio con miembros de una escuela de la Policía Nacional Civil (PNC).

En su cuenta de Facebook, Molina reclamó que en la publicidad del evento se aseguraba que los asistentes tendrían "una interacción futbolística con el brasileño, quien les mostrará diversas técnicas del fútbol que él domina y que los muchachos pueden practicar y aplicar". La publicidad indicaba que los "privilegiados" que asistieran serían 90 personas.

Pero estando en el lugar del evento, el sobrino de Molina quien llegó emocionado por conocer a su ídolo, tuvo que estar con "más de 200 niños en la cancha" de estadio "Mágico" González. 

Además, reclamó que el evento comenzó tarde, que el jugador no mostró sus habilidades con el balón y que las fotos fueron grupales y no personales, como suponían quienes habían pagado.

Molina señala que al hacer evidente su malestar, uno de los organizadores se limitó a responderle que "ese era el plan (que Ronaldinho jugara con los asistentes) pero no pasó".

La mujer asegura que ha intentado hacer el reclamo de manera formal a la empresa Promueve, que estuvo a cargo del evento, pero que no ha logrado ponerse en contacto con ellos. "Lo menos que deberían de hacer es devolver el dinero, aparte de eso uno esperaría una disculpa pública por engañar a tanto niño emocionado", aseguró la mujer quien dice que no puede explicarle a su sobrino los motivos por los que no jugó con Ronaldinho.

La promotora no se ha pronunciado sobre el caso. Además, en redes sociales no hay más reclamos sobre posibles inconformidades.

No se pudo contactar con la Defensoría del Consumidor para conocer si tiene algún reclamo formal por este caso, que la usuaria catalogó como publicidad engañosa, ya que en el evento no se brindó lo que se ofrecía en la promoción.