La pasión de los aficionados argentinos por el fútbol es tal que ni el presidente de ese país, Mauricio Macri, se contiene. No obstante, en su última demostración el mandatario salió lesionado. 

El mandatario recibió un pelotazo en la entrepierna durante los actos realizados en un evento en el que se escogieron a los 11 niños que van a acompañar a los seleccionados albiceleste en el debut con Islandia.

Rompiendo el protocolo, Macri decidió jugar un poco con los niños y para eso se puso de portero y los niños tenían que intentar anotar un gol.

Uno de pequeños se dispuso a lanzar el balón, pateó y su disparo, a media altura y al centro, no le dio tiempo a Macri de reaccionar.

Luego del pelotazo, el presidente hizo uno que otro gesto de dolor mientras algunos niños se sorprendieron de lo ocurrido, el hecho arrancó las risas de la prensa que cubría el acto.

Algunos bromearon con el futuro del pequeño como futbolista y lo mal portero que es Macri.