Andrés “N”, acusado por la Policía de la ciudad de Atizapán, en México, de ser un feminicida en serie confesó que además de matar se comía partes de algunas de sus víctimas y que les echaba sal para conservarlas.

La captura ocurrió el 15 de mayo en la casa del sujeto ubicada en una colonia del municipio de Atizapán de Zaragoza.

De acuerdo con el reporte de Excelsior, después del arresto del sospechoso, de 72 años, lo llevaron a un centro penal donde fue interrogado por los oficiales hasta que confesó que él era el responsable.

Explicó que en muchas ocasiones después de asesinar a las víctimas las descuartizaba y se comía algunas partes del cuerpo, mientras que otras las cubría con sal para disminuir la velocidad de descomposición de la carne.

En el caso de los trabajos en la casa del asesino las autoridades ya reportan el hallazgo de los cadáveres de unas 10 personas, pero temen que la lista se vaya incrementando.

En la casa del feminicida y caníbal encontraron credenciales, ropa, calzado, maquillaje de las víctimas, así como cintas de video en las que se habría grabado algunas muertes.

También localizaron una lista que contiene 29 nombres de mujeres, que los fiscales temen que sean las víctimas que el anciano habría asesinado a lo largo de 20 años.