La Fuerza Nacional Antipandillas (FNAMP) detuvo al "Cholo Houston", catalogado como un peligroso cabecilla de la MS-13 que se daba el lujo de vivir a cuerpo de rey luego que las autoridades descubrieran que residía en una lujosa casa.

Además, el delincuente tenía una fuerte cantidad de dinero en efectivo que guardaba en una caja fuerte, tenía varios carros de lujo y una colección de relojes, entre otros artículos.

El sujeto en cuestión es Carlos Alberto Álvarez Cruz, de 39 años, fue detenido el 30 de agosto en la colonia Loma Verde, en Tegucigalpa, capital de Honduras.

Según el periódico La Tribuna, Álvarez Cruz tenía acumulado seis millones 287 mil 500 lempiras en efectivo, además le descubrieron cuentas bancarias, valiosas joyas, cuatro lujosos vehículos (dos de colección) y juguetes de alto costo por mencionar algunas pertenencias que le fueron decomisadas.

Para las autoridades, la vida de lujos que tenía el sujeto se comparaba decía mucho de la jerarquía que tiene en la estructura delincuencial.

Fuentes oficiales detallaron que el sujeto es acusado de coordinar y planificar una serie de delitos a nivel nacional, entre ellos, homicidios y la coordinación de extorsiones a comerciantes en todo el territorio hondureño.

“El Cholo Houston” ya había estado preso al ser capturado en el 2007 por los delitos de portación ilegal de armas y asociación ilícita, cuya condena pagó en la desaparecida Penitenciaría Nacional ahora nombrada Centro Penal de Támara.

Tras realizar investigaciones policiales que duraron meses, agentes de la FNAMP finalmente detuvieron a este cabecilla de maras viviendo a cuerpo de rey en una lujosa residencia ubicada en la capital hondureña.

“El Cholo Houston” tenía una vida de millonario, se daba los lujos que quería a costa del dinero que exigían a sus víctimas, en parte, producto de la extorsión.

Las autoridades informaron ese tipo de vida llena de lujos no pueden acceder pandilleros de menor rango en la estructura criminal, ya que todo el dinero iba a parar a la vivienda de Álvarez Cruz producto de las extorsiones en Tegucigalpa y Comayagüela, detalló un portavoz de la FNAMP.

Fotos cortesía de La Tribuna de Honduras