Una modelo inglesa murió al caer a un abismo de 30 metros de profundidad cuando trataba de hacerse una selfie en la reserva de Diamond Bay, Sídney, Australia.

Según una publicación del periódico chileno Publimetro, Madalyn Davis, de 27 años, visitaba la zona como turista y la noche antes de la tragedia había asistido a una fiesta.

La joven juntos a otros siete amigos que visitaban el Sidney, decidieron ir a la reserva de Diamond Bay para tomarse algunas selfies en el acantilado, el cual es visitado todos los días por turistas que buscan un mejor ángulo para la fotografía.

Se cree que Davis traspasó una valla de seguridad del lugar para sentarse al borde del precipicio donde perdió el equilibrio y cayó al mar.

El cuerpo de la modelo fue encontrado y recuperado por autoridades locales después de cuatro horas de intensa búsqueda.

La Policía de Sídney aseguró que en agosto de 2019 otra joven murió al intentar tomarse una foto en el mismo sitio.