Los padres de una niña de tres años, en Australia, han sido condenados a trabajo comunitario por provocarle daños cerebrales al someterla a una dieta vegana.

La condena fue dejada en firme por un tribunal del país oceánico el lunes.

Los problemas con la niña se iniciaron en 2018 cuando ella tenía un año, ya que fue ingresada por desnutrición a un hospital con hematomas, erupciones cutáneas, decoloración de la piel y con sangre muy oscura en su pañal.

Los médicos establecieron que a los cuatro meses los padres ignoraron las indicaciones de un pediatra, que les recomendaba darle leche en polvo ya que la progenitora no lactaba lo suficiente.

En lugar de atender las indicaciones la pareja optó por darle leche de coco, alimentos de origen natural y otros suplementos caseros.

La bebé perdió peso y los papás insistieron en la dieta vegana y no la llevaron a un pediatra, a pesar de que se le estaban acumulando los padecimientos hasta que fue ingresada a cuidados intensivos donde permaneció por un mes.

Las autoridades australianas acusaron a los padres de lesiones graves por negligencia y el juez terminó condenado a los progenitores a un año de trabajo comunitario.

El juez expuso que la única razón por la cual no había enviado a los papás a la cárcel era porque la niña de tres años, que actualmente sigue una dieta de recuperación, iba a continuar sufriendo.