Freddie Mercury, vocalista de Queen, tuvo diez gatos a los que consideraba su familia y les dedicaba sus canciones
La devoción de Mercury a sus gatos fue algo muy profundo, los trataba como a sus propios hijos y los convirtió en sus únicos herederos, junto a su gran amor, Mary Austin.
No es un secreto que a Freddie Mercury, vocalita del grupo inglés Queen le encantaba la música, la moda extravagante y ser el foco de atención sobre el escenario, pero hay algo de lo que pocos hablan y es clave en su personalidad: su obsesión por los gatos.
Recientes estudios detallan que el cantante tuvo un total de 10 gatos: Tom, Jerry, Tiffany, Dorothy, Delilah, Goliath, Lily, Miko, Oscar y Romeo. "Sus gatos eran su familia", reveló Peter Freestone, asistente de Mercury en su libro de memorias.
Además, aseguró que el cantante le daba a cada gato su propio calcetín navideño lleno de golosinas y juguetes, como si se tratase de niños.
La devoción de Mercury a sus gatos fue algo muy profundo, los trataba como a sus propios hijos y los convirtió en sus únicos herederos, junto a su gran amor, Mary Austin, según revela el sitio Nueva Mujer.
En la portada de "Innuendo", el último álbum de Queen con Mercury, se muestra una foto del cantante vestido como un bufón, mientras un gato se sienta en cada uno de sus hombros y otro sobre su cabeza. El álbum incluye la canción "Delilah", la cual no está dedicada a una mujer sino a uno de sus gatos.
En 1985, Mercury llevó su obsesión a otro nivel, cuando lanzó su primer álbum en solitario, Mr. Bad Guy. Aunque no era precisamente un álbum sobre gatos, muchas de las canciones eran sobre ellos. En la dedicatoria se puede leer "A mi gato Jerry, Tom, Oscar y Tiffany y a todos los amantes de gatos en el universo".