Guillermo del Toro saca a la venta su colección de rarezas
El impacto de los incendios forestales que azotaron Los Ángeles a comienzos de este año llevó a Guillermo del Toro a replantear el destino de su vasta colección personal, conocida como Casa Desolada. El cineasta mexicano, reconocido por su fascinación por lo gótico y lo fantástico, ha decidido desprenderse de una parte significativa de este acervo, permitiendo que otros custodien y preserven piezas que, hasta ahora, formaban parte de su universo privado.
El próximo 26 de septiembre, Heritage Auctions dará inicio a la primera de tres subastas en las que se ofrecerán objetos emblemáticos de la colección de Del Toro. Entre los lotes figuran obras de arte originales, diseños conceptuales, utilería cinematográfica, maquetas y cómics, todos ellos representativos de las obsesiones y el imaginario del director.
La selección abarca desde elementos vinculados a sus películas más celebradas, como "El laberinto del fauno" (2006) y "La forma del agua" (2017), hasta piezas que reflejan su interés por el terror, la ciencia ficción y los mitos.
La magnitud de Casa Desolada resulta notable: alberga cerca de 10,000 objetos, que incluyen pinturas inquietantes, maquetas de Frankenstein y libros de ocultismo. Según relató el propio Del Toro a LAist en 2016, “básicamente, la casa es una biblioteca de imágenes, una biblioteca de sonidos y una biblioteca de ideas”.
Esta colección, que podría llenar una vivienda entera en un suburbio de Los Ángeles, tuvo una exhibición pública excepcional en 2017 durante la retrospectiva “Guillermo del Toro: En casa con monstruos” en el LACMA, donde se mostraron unos 500 objetos.
La decisión de subastar parte de este patrimonio responde, en palabras del director, a una toma de conciencia sobre la responsabilidad de compartirlo. “Esta situación me ha hecho consciente del tamaño imposible de la colección y de la responsabilidad de compartir este tesoro meticulosamente seleccionado con otros que puedan aceptar el compromiso de salvar estas piezas de cultura y belleza para las generaciones venideras”, explicó Del Toro.
Entre los objetos más codiciados que saldrán a la venta destacan un boceto conceptual del vampiro de su ópera prima, Cronos (1992), una escopeta de utilería utilizada en Hellboy II (2008), un mono de conducción empleado en Pacific Rim (2013) y una maqueta original del Hombre Anfibio de "La forma del agua". "El laberinto del fauno", película que marcó un hito en la carrera del director tras su paso por Cannes y los premios Oscar, ocupa un lugar central en la subasta.
Se incluyen bocetos del Hombre Pálido y del laberinto, realizados por el artista conceptual Raúl Monge, así como una maqueta de tres piezas de la entrada al laberinto y el arte original de Allen Williams para la novelización ilustrada de la película.
Una de las piezas más personales para Del Toro es una obra conceptual de Raúl Villares que representa el molino de "El laberinto del fauno". El director confesó: “Durante años, fue mi favorita y la colgaba en mi oficina como inspiración. Es muy difícil desprenderse de esta pieza”.
La subasta también refleja las influencias artísticas de Del Toro. Entre los lotes figuran obras de Jean Giraud (Moebius) y Robert Crumb, así como dos láminas originales de Bernie Wrightson, célebre por su adaptación ilustrada de Frankenstein (1977-1983). El relato de Mary Wollstonecraft Shelley ha sido una fuente de fascinación constante para el cineasta, cuya propia versión cinematográfica de la novela gótica se estrenará el mes próximo.
El catálogo incluye, además, la portada original de Mike Mignola para el segundo número de Hellraiser (1990) de Marvel, una adquisición que, según Del Toro, “me llevó mucho, mucho tiempo conseguir”. Otro de los lotes destacados es un diseño conceptual de HR Giger para el guion inédito de ciencia ficción "The Tourist", que muestra dos formas extraterrestres translúcidas y que el director considera “un ejemplo prístino y central” del trabajo con aerógrafo del artista.
La singularidad de la colección ha sido subrayada por Joe Maddalena, vicepresidente ejecutivo de Heritage Auctions, quien afirmó: “La colección de Guillermo del Toro es única. No se trata solo de recuerdos, sino del ADN visual y emocional de una fuerza creativa singular. Cada pieza de esta subasta ofrece una ventana al corazón y la mente de un verdadero autor”.