El último concierto que reunió a Ozzy Osbourne con la alineación original de la legendaria banda Black Sabbath no solo marcó el emotivo final de una era que inició en los años setenta, sino que también recaudó más $190 millones de dólares que fueron destinados a causas benéficas.

La recaudación total del concierto de despedida para "El Príncipe de las Tinieblas" fue donado a Cure Parkinson’s, una organización que investiga la enfermedad que padece el propio Osbourne. Asimismo, el dinero se distribuyó a otras dos instituciones, el Birmingham Children's Hospital, un hospital pediátrico de referencia en Inglaterra, y el Acorn Children's Hospice, que brinda cuidados paliativos a niños con enfermedades terminales.

El pasado 5 de julio se llevó cabo el último concierto de Ozzy Osbourne, una de las figuras más importantes e influyentes dentro de la historia de la música. Osbourne subió al escenario con la alineación original de Black Sabbath. Fue un día completo de puro rock. Bandas como Slayer, Metallica, Anthrax, Guns N' Roses y Pantera fueron algunas de las que homenajearon al "Gran Oz".

Tom Morello, guitarrista de Rage Against the Machine y uno de los organizadores del concierto, se mostró muy contento por el resultado que arrojó el concierto homenaje de Ozzy y Black Sabbath. "Nos propusimos no solo crear el mejor día en la historia del heavy metal. Gracias, Ozzy Osbourne, por confiar en mí para ser el director musical del show 'Back To The Beginning'. Fue más de un año de trabajo duro, pero el heavy metal fue el que me hizo amar la música y fue un trabajo de amor", escribió.

"Recaudamos una tonelada de dinero para una gran causa y tantos grandes músicos, bandas y fanáticos de todo el mundo rindieron homenaje a los grandes de todos los tiempos", dijo Morello.