La tarde de este 25 de junio, luego de finalizar las primeras investigaciones, autoridades de la Fiscalía General de la República (FGR) presentaron en el Juzgado de Paz de Zaragoza, en La Libertad, el requerimiento en contra de un sacerdote que ha sido señalado -por una familia- de haber cometido una agresión sexual en perjuicio de un menor de edad.

El párroco, identificado como José Adonay Chicas Campos, fue capturado por agentes de la unidad de investigaciones de la Policía Nacional Civil (PNC), el pasado 22 de junio, luego de que se presentara una denuncia en su contra por el supuesto delito de abuso sexual en perjuicio de un menor de edad, a quien habría agredió durante dos años. Este delito comprende entre 12 a 16 años de prisión, de acuerdo al Código Penal.

Las indagaciones preliminares señalaron que la víctima recibía una remuneración económica después de cada uno de los encuentros sexuales con el imputado de 58 años de edad.

"Las investigaciones han determinado que aproximadamente desde dos años atrás el sacerdote ha obligado a la víctima a que le practique ciertos hábitos y luego lo remuneraba con 50, 20 o 10 dólares", comentó el fiscal del caso, quien indicó que luego el acusado ya no le daba nada de dinero al menor de edad.

La Fiscalía acusa a Chicas Campos por otros dos delitos: remuneración por actos eróticos, que comprende una pena máxima de ocho años de prisión; y por corrupción de niños agravada por medio del uso de las tecnologías, que tiene hasta 16 años de cárcel.

Los hechos, según las indagaciones, se produjeron en la casa parroquial de la iglesia que estaba a su cargo.