El presidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), Luis Cardenal,  repasó algunos temas de actualidad nacional y dijo que el presidente electo Nayib Bukele debe mandar señales positivas como nombrar un buen gabinete de gobierno para demostrar que no se dio un "salto al vacío" y así evitar la incertidumbre en los sectores productivos del país.

Cardenal dijo en esta entrevista con El Salvador Times que ya esperaban un triunfo de Bukele en las pasadas elecciones, pero no de la manera como lo consiguió, con números tan abultados y menos en primera vuelta. En este sentido, le hace un llamado a que se siente con todos los sectores para buscar soluciones. Por esa razón, dijo le tendieron la mano para trabajar y sacar adelante al país.

Además le recomendó a Bukele evitar actitudes que, dijo, tuvieron los gobiernos del FMLN donde se trató de imponer una visión ideológica que excluyó de la participación al sector productivo. 

¿Qué es lo que esperan del nuevo gobierno de Nayib Bukele?

Lo que esperaríamos nosotros es que se hayan aprendido las lecciones de lo que no hay que hacer, de los errores que cometió el gobierno anterior, el cual trató de imponer una visión ideológica, una forma de pensar, que limitó la participación del sector productivo en la toma de decisiones. Creemos que el país tiene potencial, que puede reaccionar rápidamente si las condiciones se dan. Lo que esperaríamos del presidente electo es que no repita esos errores, que entienda que la campaña ya terminó y que es el presidente de todos, que debe dedicarse a corregir al país y dejar de ser un político porque para que El Salvador salga adelante se debe unir a la sociedad en un proyecto común y se debe trabajar en conjunto los problemas que nos afectan a todos como la seguridad, la educación, la atracción de inversión, la salud, el medio ambiente, que son problemas graves con causas estructurales y que requieren de la participación de todos. Con una sociedad dividida y enfrentada es bastante difícil. Ya lo vimos luego del conflicto. Cuando gobernabaa ARENA, el FMLN se oponía a todo lo que proponía ARENA; cuando gobernaba el FMLN muchos nos oponíamos a todas las cosas que proponía el FMLN que iban en contra de la institucionalidad democrática. Esperamos que es algo que haya aprendido el presidente electo.

¿Cómo ANEP ya esperaban el resultado?

El resultado que ya lo esperábamos, pero no que fuera en primera vuelta y menos de una manera tan abultada. Lo primero que hicimos fue tenderle la mano y decirle que para todo lo que sea bueno para el país, para todo lo que sea resolver los problemas nacionales cuente con nosotros. Tenemos propuestas, vocación y voluntad de trabajar, lo único que le decimos que por su bien y por el bien del país es que nosotros no vamos a ceder en la defensa de una sociedad libre y democrática, porque no hacerlo no ha servido en otros lados del mundo donde se violan los principios de libertades, de pensamiento, de información, se resta la credibilidad, se frena el desarrollo y cuando se violan esos principios lo que se genera es hambre y más conflicto. Ya lo vemos en Venezuela, en Nicaragua, donde no ha habido verdadera libertad y democracia y ya vemos cómo están esos países. Entonces, en esas cosas nosotros no podemos ceder porque no le conviene ni a él ni al país.

¿Qué lectura se le puede dar a los números con los que ganó el presidente electo?

Es importante enviar las señales correctas. El hecho que él haya ganado las elecciones por un abultado margen en primera vuelta le da un mandato importante, pero tampoco es que le da un mandato absoluto, porque significa que a la hora de que uno ve los números, en realidad, votaron por él el 30% de los que podían votar y el 70% o votó por otro o no votó. Entonces, él tiene que mandar señales importantes que den tranquilidad a la gente de que aquí no hemos dado un salto al vacío y por eso es que se le recomendaba de que en el menor plazo posible él nombrara a su equipo de transición y empezara a nombrar su gabinete de gobierno.

A un mes de las elecciones se ha hablado de nombres de su equipo de gobierno…

Primero debe nombrar al de transición. ¿Por qué el de transición?, porque eso indica que ya está listo para recibir el gobierno y cuáles son las acciones que va a tomar en ese intercambio de poder y el del gabinete para que muestre que está tomando las decisiones acertadas de quiénes lo van a acompañar y que van a ser personas capaces, probas, honestas, con vocación de servicio. Entonces, por eso es que es importante hacerlo. Es mejor que se tarde y lo haga bien a que se apure y lo haga mal.

¿Cómo le afecta al sector productivo el hecho de que no se conocen nombres?

Es la incertidumbre, el no saber para dónde vamos o las reglas del juego, de no saber qué es lo que va a suceder. Eso genera desconfianza y eso impide que se atraiga la inversión necesaria para crecer y generar más y mejores empleos. La incertidumbre la debemos reducir al mínimo y debe el presidente electo generar la mayor confianza posible. Repito: la confianza no solo se genera con tuits, ni se genera con más controversia, sino que en estos momentos se genera dando señales de saber a dónde vamos, lo que vamos a hacer y hacer participar a los sectores de esa visión y ese plan para convencer a todos los sectores de que le ayuden y hacer realidad eso que se quiere.

¿Cómo puede lograr eso?

Por muy presidente que sea, por mucho poder que crea que tiene, para resolver los problemas que tenemos no los puede hacer una sola persona, ni un solo partido, un solo grupo de personas que esté marginado, peleado con el resto de la población no ayuda. Lo que hay que buscar es el consenso mínimo para trabajar por el bien del país porque a todos nos conviene eso. Esa es la postura que ha tomado el sector productivo desde que se supo el resultado de las elecciones.

A menos de tres meses del final del segundo gobierno del FMLN, ¿cuáles son las principales deudas que se dejan?

El problema de la seguridad, el problema del empleo, del crecimiento económico, el problema que hay con la educación donde hay menos jóvenes matriculándose en el sistema educativo y los que se gradúan no encuentran trabajo. Creo que hay una deuda tremenda en el combate a la pobreza porque por mucho que se diga de los 20 años de ARENA, cuando ARENA recibió el primer gobierno la pobreza era alta y luego de los 20 años la cerró con el 38%. Ahora, luego de 10 años, la pobreza fluctúa entre el 40% y el 37%. Eso quiere decir que hemos perdido 10 años, donde no ha mejorado y la cantidad de gente que se ha tenido que ir porque no encuentra trabajo o la inseguridad ha ido aumentando. Eso es una gran deuda.