Mientras las autoridades mantienen suspendidas las operaciones de vigilantes que custodiaban mercados y calles capitalinas mientras investigan su vinculación con una serie de homicidios cometidos en una presunta venganza contra pandilleros que operan en el Centro Histórico, el permiso que les otorga como asociación el Ministerio de Gobernación está vencido.

En los expedientes del Registro de Asociaciones y Fundaciones sin Fines de Lucro del Ministerio de Gobernación aparecen vencidos los permisos de la Asociación de Vigilantes de Mercados Municipales, Centros Comerciales, Agroindustriales y Financieros (AVIMCES).

Dicha entidad gubernamental indica en los registros que dicha asociación fue registrada el 12 de agosto de 2015. El permiso le fue otorgado a partir del 1 de enero de 2015 al 1 de enero de 2017.

Funcionarios encargados de esa dependencia de Gobernación detallaron a El Salvador Times que los miembros de AVIMCES se apersonaron a inicios del año para renovar los permisos, pero debido a que se les hicieron observaciones, no fueron autorizados y quedó pendiente su nueva inscripción.

La última junta directiva quería registrarse para el período 2017-2019. Salvador Hernández aparece como el último presidente de AVIMCES, registrado como presidente de la junta directiva.

“Esta asociación está acéfala y no cuenta con un documento legal que los ampare. No están legalmente inscritas”, dijo una funcionaria del referido registro.

El problema, según la fuente, es que al surgir un problema legal con dicha asociación no existe un representante legal o una junta directiva autorizada que pueda ser obligada por la ley a responder ante terceros.

Decisión, la suspensión

AVIMCES ha sido suspendida de sus operaciones desde el pasado 16 de marzo por orden de la Policía Nacional Civil, día en que seis personas fueron asesinadas en una escalada de violencia en las calles del Centro Histórico.

El mismo director de la Policía Nacional Civil, Howard Cotto, afirmó que esa suspensión les permitirá ahondar en las investigaciones, en las que supuestamente aparecen vigilantes de esa asociación ligados a los crímenes.

La teoría que manejan las autoridades es que el asesinato de uno de los vigilantes por parte de pandilleros motivó a venganzas que derivaron en asesinatos de vendedores callejeros, presuntos miembros de pandillas.

En total, fueron asesinados cinco vendedores supuestamente ligados a pandillas y un vigilante del Mercado Central.

La tensión en el centro capitalino y en los mercados Central, Modelo y San Miguelito creció cuando la PNC mandó a quitar a los vigilantes de AVIMCES por supuestamente estar vinculados en los asesinatos.

AVIMCES tiene una plana de 180 vigilantes y cuenta con varios años de estar prestando la vigilancia en dichos mercados y en algunas zonas donde hay puestos de venta en las calles capitalinas.

Un grupo de vendedores se inclinaron a favor de AVIMCES y exigían a las autoridades no quitarles sus funciones. Los comerciantes se oponían a que el CAM o la PNC dieran la seguridad en los mercados y en los puestos de las calles.

Los rumores indican que el temor de los comerciantes es mantener cerca a agentes de la autoridad ya que a los pandilleros no les agrada que exista ese tipo de vigilancia.

Ante esta disputa el alcalde capitalino Nayib Bukele sostuvo una reunión con los comerciantes y el edil desistió que el CAM diera la seguridad en los referidos mercados y se las cedió a la vigilancia privada.

Los comerciantes informales y de los referidos mercados sostienen que no confían en el CAM ya que cuando les decomisa mercadería no se las devuelve y en cambio la empresa AVIMCES hasta les responde cuando se pierde alguna mercancía.

Cada vendedor paga a diario entre $0.25 centavos a $2.00 dólares cada día para tener derecho a vigilancia y seguridad privada.

Bukele incluso dijo que enviaría carta al Ministerio de Seguridad Pública para que revocara la suspensión de 15 días a AVIMCES.

La Ley de Mercados de la Ciudad de San Salvador, en su artículo en su artículo 1 manda a la municipalidad a velar por la seguridad en los centros de abasto.

El director de la PNC comisionado Howard Cotto advirtió a la municipalidad que respetaba su decisión, pero que AVIMCES seguía suspendida.

Sin embargo, en el mercado San Miguelito se conoció que los vigilantes privados laboran de civil mientras concluye la suspensión de sus labores.

Mientras las cosas se clarifican en los eventos fatídicos del 16 de marzo, la Fiscalía mantiene abierta una investigación sobre los asesinatos y los incidentes posteriores. Lo que pase cuando finalicen los 15 días de suspensión aún se desconoce.