A diario son deportados a El Salvador un promedio de 11 niños, lo que para la Dirección General de Migración y Extranjería representa actualmente un alza de casos de 86.4 % superando las cifras del año pasado cuando fueron 850.

Según datos difundidos por dicha institución, del 1 el enero al 24 de mayo de este año se han confirmado 1,584 casos de niños y adolescentes salvadoreños deportados.

La mayoría (1,547) provenían de tierras mexicanas y lo hicieron por vía terrestre, mientras que un reducido número (36) retornaron al país en vuelos federales desde Estados Unidos. Hubo un caso más del que no fue detallado su lugar de retorno.

En 2018, durante el mismo período, fueron deportados a El Salvador 37 menores provenientes de Estados Unidos, 810 lo hicieron desde México y 3 más de otros países.

En términos generales, al que también se incluyeron adultos, las autoridades salvadoreñas reportan que del 1 de enero al 15 de mayo de este año 10,876 compatriotas fueron retornados, lo que significa un aumento de 1,817 casos en relación al año pasado.

Este año, solo de Estados Unidos ya fueron deportados 6,252 connacionales, mientras que los salvadoreños que a penas llegaron a México la cifra es de 4,484.

Más de tres mil dejaron el país

Desde finales de octubre del año pasado unos tres mil compatriotas, provenientes de diferentes puntos del país que concentrados en la plaza al Divino Salvador del Mundo, iniciaron un largo recorrido en las llamadas “caravanas” en busca de cumplir el tan anhelado “sueño americano”.

Para ese entonces un grupo considerable de hondureños había iniciado su recorrido a tierras norteamericanas, luego varios grupos de salvadoreños se sintieron motivados a viajar de esta forma pese a los peligros.

Hasta la fechan se han confirmado cinco caravanas las que dejaron el país, entre las que también figuraban niños menores y adolescentes.

#Deportaciones compartimos cifras de niñas, niños y adolescentes correspondientes al 24 de mayo de 2019 pic.twitter.com/4ZsFNQk92H

— Migración y Extranjería El Salvador 🇸🇻 (@migracion_sv) 27 de mayo de 2019

 

Un camino lleno de peligros

Los grupos que se organizaban para dejar el país lograron llamar la atención de las autoridades, las cuales, constantemente insistieron en que era una forma peligrosa de viajar ya que se exponían a todo tipo de peligros, sobre todo los menores.

Algunos riesgos a los que se ven expuestos son: ser víctimas de estafadores, es decir, de personas que les prometen llevarlos hasta Estados Unidos pero que luego los abandonan en tierras mexicanas.

Al convertirse en víctimas del crimen de organizado, pues a lo largo del trayecto tienen que caminar por zonas donde operan grupos delincuenciales comunes y estructuras criminales bien organizadas.

También corren peligro de ser extorsionados, esto ocurre cuando desde un punto entre Guatemala y México los migrantes son retenidos por delincuentes hasta que sus familiares desembolsen sumas considerables de dinero.

En cuanto a violaciones y trata de personas; los casos están relacionados sobre todo con abusos que se cometen en contra de mujeres y menores.