La Alcaldía de San Salvador ya piensa en la “nueva normalidad” que se va a implementar en los mercados capitalinos, después de salir del confinamiento: guardando las medidas sanitarias para evitar contagios del coronavirus.

El departamento de San Salvador es la zona de mayores contagios del país, especialmente la capital, por lo que se tienen que asegurar las medidas del distanciamiento social.

El alcalde Ernesto Muyshondt tiene claro que si la capital vuelve a como estaba antes de la pandemia “sería un desastre” en términos sanitarios y que la vuelta debe ser ordenada.

“Creo que el Gobierno debe tener las herramientas para que el regreso sea ordenado y si dicen ‘Abrimos tal día’ y llega ese montón de gente que congrega en el centro de San Salvador como se congregaba antes, entre millón y medio y dos millones de personas, sería un desastre y casi que todos los éxitos que se han tenido en los últimos dos meses y medio, y los sacrificios que han implicado guardar cuarentena para la inmensa mayoría de gente, se echarían a la basura”, consideró.

Es precisamente ese punto, de una apertura ordenada y por fases, que se está discutiendo en la Asamblea Legislativa entre diputados y funcionarios del Ejecutivo una ley que permita tener las herramientas para llevarla a cabo.

El regreso a las actividades en países que han salido del encierro ha llevado la implementación de protocolos sanitarios como desinfección constante en área de trabajo, uso de mascarilla y alcohol gel, entre otros.

“Ambientes de trabajo distintos, vamos a entrar a una nueva normalidad donde van a cambiar nuestros hábitos dentro y fuera del trabajo”, agregó.

En el caso de San Salvador, esa “nueva normalidad” para por reordenar el tema de los mercados, lugares que eran muy abarrotados antes de la crisis.

“Lo que nos preocupa en San Salvador es el tema de los vendedores (…) no van a poder volver a la normalidad de antes, tenemos que preparar nuestra ciudad para eso, las ‘moloteras’ que se hacían en el centro no se van a poder volver a ver mientras exista el Covid-19”.

La comuna planea turnos entre los comerciantes y evitar aglomeraciones en las entradas para evitar contagios.

“Una alternativa sería que haya turnos, que a uno le toque un día y al que está al lado le toque al día siguiente y así se van a tener que ir intercalando para guardar más distanciamiento, tenemos que mejorar la circulación tanto vehicular como particular”, enfatizó.

Dijo que quieren consensuar las medidas de la propuesta con los vendedores, pero hay puntos básicos como la higiene tanto de los que vendan los productos como de las calles.

“Se ha retirado una enorme cantidad de materiales del centro en conjunto con los vendedores desde que se inició la cuarentena”.

Otro de los temas es la circulación de las unidades del transporte colectivo por la zona y eso se debería de trabajar junto con el Viceministerio de Transporte (VMT).

Valoró que el paso de los buses “debería de estar fuera del cuadrante del centro para evitar que, donde son las paradas de buses, ahí se congregan una gran cantidad de personas que se bajan del transporte y los que están vendiendo”.

Muyshondt dijo que es una oportunidad para hacer que muchos comerciantes pasen a la formalidad y de ordenar la ciudad.

“Dentro de todo lo malo que ha traído este virus para nuestra ciudad y el mundo también hay oportunidad de hacer mejor las cosas (…) también servirá para ordenar nuestras ciudades y pasar de la informalidad a la formalidad con más vendedores que se ganen su sustento contribuyendo a la economía”, expuso.