José Balmore Calleja, de 54 años,  fue condenado en 2015 a una pena de tres años de prisión por violencia intrafamiliar. En esa ocasión, la cárcel le fue sustituida por medidas que lo obligaban a acudir a un juzgado a firmar cada cierto tiempo. 

Este domingo, la Fiscalía presentó la acusación formal en su contra por un nuevo delito: feminicio agravado.

Calleja acudía a firmar desde hace 20 meses a un juzgado; sin embargo, ahora está detenido en bartolinas policiales por ser el principal sospecho del homicidio de Roxana Maricela Benítez, de 21 años, quien las autoridades aseguran era su pareja sentimental. 

Él fue capturado minutos después del crimen en la finca Esmeralda de dicho sector. La Policía aseguró que éste estaba escondido e intentaba huir de la escena, mientras que él en su defensa dijo que había ingresado al terreno "porque se sentía mal".

Tras la captura, agentes policiales informaron que el sujeto atacó a la mujer luego de tener una discusión de pareja. Esta versión no fue aceptada por Calleja, quien dijo que no conocía a la víctima y que no se enteró de lo sucedido hasta ser detenido. "Hasta me extraña eso, porque no sé quién es", aseguró.

Además dijo que la sangre que tenía en la camisa al momento de la detención era suya y no de la víctima. "Me había rasurado y andaba unas machas de sangre", afirmó al tiempo que aseguró que el machete que le fue incautado era su herramienta de trabajo porque se dedica a la jardinería. 

Calleja ha sido acusado por el delito de feminicidio agravado por la Fiscalía General de la República ante los juzgado de paz de Antiguo Cuscatlán.

De ser encontrado culpable podría ser condenado con hasta 50 años de prisión.