Amanda y Cristóbal

Agricultores de Sonsonate han perdido 374 manzanas de cultivo por lluvias

Imagen de referencia.
Han pedido apoyo al ministerio de Agricultura.

Las fuertes lluvias generadas por las tormentas tropicales Amanda y Cristóbal han generado que los agricultores del municipio de Sonsonate hayan perdido 374 manzanas de cultivo, informó el alcalde José Aquino.

El edil dijo que ya han solicitado el apoyo del ministro de Agricultura, Pablo Anliker.

La zona más afectada por las pérdidas ha sido el cantón Chiquigua. “Hemos tenido (en dicho cantón) alrededor de 200 agricultores que han perdido toda su siembra”, informó.

Dijo que se trata de la siembra que se hizo con la semilla que dio el Gobierno en los paquetes agrícolas “la acababa de sembrar la gente y por el exceso de humedad se han perdido”.

Ante la pérdida van a entrar al proceso de resembrar y que la comuna va a apoyar a las personas que han registrado las afectaciones y esperan también el apoyo del ministro Anliker. “He hablado con él y nos ha ofrecido que nos va a ayudar a resolver el problema de estos agricultores porque son gentes que siembran para su sobrevivencia”.

Son 634 casas inundadas

Las lluvias también dejaron daños graves a la infraestructura del municipio y solo en la zona de Barra Salada hubo 241 viviendas inundadas.

“Hemos tenido un total de 644 viviendas con inundación en el área rural y 42 en el área urbana, de estas totalmente dañadas tenemos 19 casas que vamos a construir”, anunció el edil.

Dijo que una parte de las familias a las que las casas le fueron totalmente destruidas no son dueños de los terrenos donde habitan, por lo que el proceso de construirle una nueva se ha retrasado.

“Hay daños de viviendas que tenemos que acompañarla con la dotación de un terreno, entonces estamos tratando de lograr un traslado”, indicó, pero dijo que tienen el problema que algunos no se quieren mover de donde están habitando, aún con el riesgo que implica.

Ejemplificó: “Si usted vive en el cantón El Presidio y lo quiero trasladar a Miravalle porque tenemos disponibilidad de terreno, la gente no se mueve. Creo que es por tiempo de vida, tenemos una comunidad que se llama Río El Jujupe, hay una zona de peligro de deslave y en un momento pedí a la gente salir de la zona, que le íbamos a construir casas bonitas donde fueran propietarios y dijeron que no porque tenían 50 años de vivir ahí”.