Un hombre que se dedica a la mecánica automotriz, fue condenado a 26 años de prisión por el robo a mano armada, realizado a diversos camiones repartidores de varias empresas entre 2009 y 2012, entre las que se encuentra la sociedad Steiner, a la que despojó de un vehículo y más de $13,000.

A José Daniel Ramírez Barrientos se le atribuye que fue el verdugo por tres años de los vendedores ruteros que operaban en diferentes puntos del país específicamente en zonas de San Salvador, San Vicente, La Libertad y Santa Ana.

De acuerdo a la acusación fiscal, el primer robo realizado por Ramírez se produjo en junio de 2009 cuando interceptó un vehículo de la sociedad Steiner S.A. de C.V. (empresa dedicada al mayoreo de productos de primera necesidad).

Según se estableció, interceptó a sus víctimas cerca del desvío al municipio de Apastepeque, en el sentido que conduce al oriente del país desde San Salvador. Junto a otro cómplice, obligó a los empleados de la empresa a entregarles el vehículo en el que se conducían.

El peritaje realizado a la empresa ofendida señaló que el producto que robó Barrientos asciende a $13,105.64, además se reportó el robo del vehículo utilizado para repartir el producto y que fue encontrado días después en la cincuenta avenida norte de San Salvador, cerca de la terminal de oriente.

Un testigo criteriado presentado por el ministerio público detalló que luego de este asalto, él junto a Barrientos planificaron un nuevo golpe, y eligieron como víctima a empleados de la empresa Bocadeli.

A eso de las ocho de la noche del 3 de marzo de 2010 localizaron al vehículo repartidor de la empresa de golosinas sobre el bulevar Venezuela en la incorporación al barrio Modelo de San Salvador.

Los dos sujetos iniciaron la persecución hasta llevar a sus víctimas hacia la plaza El Trovador, donde los obligan a bajarse del carro para salir con rumbo a San Marcos con lo robado.

Un año más tarde (en 2011), Ramírez Barrientos volvió a atacar a otros empleados ruteros, pero esta vez fue de forma fortuita ya que aprovechó que un vehículo de la empresa Inversiones Globales se averió en la carretera que conduce de San Salvador al occidente del país.

Según el reporte policial el empleado de dicha empresa se quedó varado en la carretera Panamericana a eso de las 5:00 de la tarde del 8 de diciembre de 2011. Al ver esto el delincuente llegó hasta donde el conductor a quien despojó del producto que movilizaba en ese momento.

El último golpe que dio fue en 2012 cuando planificó junto a un camionero el robo de un furgón con mercadería propiedad del beneficio Río Zarco frente a la residencial Santa Ana Norte.

En este caso, se señala que le hombre tenía coordinada la entrega de un furgón con el empleado de dicho beneficio. Para no despertar sospechas, a punta de pistola despojó del automotor a su aparente víctima, que en verdad era su cómplice.

Según el sujeto que los delató, a tres kilómetros de donde se produjo el robo, el conductor del furgón fue dejado en libertad.

Las pruebas que se presentaron fueron suficientes para que el juez Quinto de Sentencia estableciera la culpabilidad de Ramírez Barrientos en los casos expuestos, esto a pesar que solo en el primero de los casos se estableció el monto de pérdida por el robo.

El juez le dictaminó una condena de 26 años de prisión por los delitos de robo y hurto agravado.