Un maestro de un colegio privado de esta capital, quien era el encargado de la disciplina de los jóvenes de bachillerato, fue acusado por intentar violar a una estudiante a quien además le mostró sus órganos genitales.

El profesor fue absuelto del proceso judicial que se desarrolló en su contra debido a que la víctima se negó a acudir al juicio celebrado esta semana en un tribunal de San Salvador.

El formador, que pasó varios meses en prisión, argumentó que no cometió los hechos que se le atribuyen y que siempre se desempeñó apegado a lo que le exigía su cargo. 

En mayo de 2016 Raúl C. intentó propasarse con una alumna de primer año de bachillerato, a quien mostró sus órganos genitales e hizo proposiciones indecorosas, según consta en el parte fiscal. El acto no se consumó debido a que otro alumno –sin intención- interrumpió el ataque.

El maestro dijo que nunca intentó nada contra la joven quien lo acusó y por el cual estuvo varios meses en prisión, ya que dijo que él es padre de familia y que dicha acción “no le gustaría que se presentara en alguno de sus hijos”.

De acuerdo a lo planteado por la fiscal a cargo del caso, la mañana del 24 de mayo de 2016 durante el segundo receso de la jornada matutina, Raúl pidió a la alumna que le ayudara a realizar unas labores en su oficina. 

Al ser una de las estudiantes más aplicadas, el profesor sabía que no se iba a negar a colaborar, pero en realidad tenía intenciones de proponerle mantener relaciones sexuales.

De acuerdo al relato de la víctima, el maestro comenzó a tocar sus partes íntimas y al ser rechazado, en lugar de desistir pareció excitarse más a tal punto de mostrarle sus genitales para intentar que la joven también se excitara.

Al seguir recibiendo una respuesta negativa, el hombre optó por usar la violencia, pero sin llegar a cometer su objetivo debido a que otro alumno llegó a la oficina para pedirle una firma para un permiso.

En ese momento, el profesor salió y la estudiante por temor a ser agredida por este optó por quedarse en silencio al interior del salón, del cual pudo salir minutos más tarde hasta que el profesor se había retirado del lugar.

Al finalizar la jornada de clases y regresar a su casa, la joven narró todo a sus padres y juntos acudieron a interponer la denuncia con las autoridades policiales, que procedieron con la captura del sujeto ese mismo día.

A inicios de la presente semana se realizó la vista pública en contra del profesor, a la que la víctima no acudió ya que según la Fiscalía el acusado negoció con los padres de la joven para que no llegara a dar su testimonio.

La fiscal a cargo del caso también sostuvo que Raúl había entregado dinero para que la joven no se presentara a la audiencia.

Ante la ausencia de la víctima, el juez decidió absolver al imputado, debido a que no se contaba con la prueba directa, ya que el testimonio del otro alumno involucrado de manera indirecta en la situación no era suficiente para condenarlo.

Por lo anterior, dejó en libertad al profesor de quien se desconoce si volverá a trabajar a la institución donde sucedieron los hechos y en la que la víctima sigue estudiando el bachillerato.

La fiscal a cargo del caso también alegó que al no tener colaboración de la víctima no pueden seguir el proceso, por lo que descartó la posibilidad de apelar a la decisión del juez.