Después de un año y dos meses de permanecer detenidas injustamente, dos mujeres recobraron su libertad luego que el juez 5° de Sentencia de San Salvador determinara que su captura por el delito de extorsión fue ilegal, un montaje, en el que participaron al menos cinco investigadores de la Policía.

Los abogados defensores de Rosa Z., de 20 años, y Ana A., de 23, confirmaron a El Salvador Times que ambas fueron liberadas el 7 de julio luego de que el juez las encontrara inocentes en razón de las irregularidades que fueron comprobadas en su captura.

Mientras tanto, los policías que incriminaron falsamente a las mujeres siguen trabajando en la Policía.

La sentencia se logró a pesar de que ninguno de los tres fiscales que conocieron el caso diligenciaron las pruebas de descargo, según el mismo juez quien en una de las sesiones de la vista pública se los recriminó.

Por ahora, están siendo investigados en auditoria de la misma institución que representan.

El hecho ocurrió el 12 de mayo de 2016 cuando la Policía capturó a las mujeres en un supuesta cobro controlado de una extorsión, según el oficio levantado por los agentes.

En dicho oficio, detallaron que recibieron una denuncia a las 6:30 de la mañana y que realizaron diligencias de negociación con los supuestos extorsionistas que culminaron con la captura de las mujeres a las 3:00 p.m. de esa misma tarde.

Sin embargo, las mujeres dijeron a sus defensores que policías a bordo de una patrulla y un pick up verde llegaron a la casa No. 13 de la colonia Veracruz en Cuscatancingo donde Rosa tenía un negocio de venta de tortas y licuados.

El uniformado compró un licuado mientras le explicaba a la mujer que lo acompañara a la delegación debido a que en su contra pesaba una denuncia por supuesto maltrato infantil, haciendo que Rosa saliera del negocio a las 11:30 de esa mañana, para luego llevarla a pocas cuadras de ahí a una zona conocida como "El Chevere".

En ese lugar, el cabo Horis R. la obligó a tomar con sus manos un celular y mientras lo hacía, la fotografiaron desde varios ángulos, según la declaración de la mujer.

Luego, fue llevada hacia la venta de comida rápida Don Pollo de esa localidad donde fue obligada a sentarse en silencio bajo la amenaza de muerte; mientras le pidieron que se comunicara por teléfono a su amiga Ana.

La amistad que existe entre ambas fue suficiente para que Ana sin mayor atraso se encontrara con ella en lugar indicado.

Los agentes las obligaron a subirse en un bus de la ruta 24 bajo la custodia de un policía y se bajaron en las cercanías de la iglesia católica que Cuscatancingo. Luego, las condujeron hacia un banco; después, ambas caminaron hacia una esquina donde fueron capturadas nuevamente por otros agentes.

En el proceso, se evidenciaron inconsistencias tales como que el cabo Horis dijo que la entrega de billetes a la víctima fue 11 de mayo del 2016; es decir un día antes del operativo.

Además, se comprobó en el libro de asistencia que el cabo había entrado a trabajar a las 8:30 de la mañana del día de operativo, por tanto, no pudo recibir una denuncia dos horas antes.

Asimismo, la defensa presentó un video del cajero automático del banco Davivienda y se ve al cabo Horis en el interior del banco con las dos mujeres, antes de las 12:00 del mediodía, cuando se dijo que fueron detenidas por la tarde.

Esas irregularidades fueron presentadas en su momento a la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos que luego de investigarlas determinó que fue una captura "arbitraria". Los interesados han interpuesto un recurso ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ).

Los agentes aún no son investigados

Los defensores de las mujeres han interpuesto denuncias ante la Fiscalía, pero no se ha abierto un proceso contra los policías, que podrían haber cometido al menos seis delitos: detención ilegal, fraude procesal, actos arbitrarios, simulación de delitos, falso testimonio y hasta privación de libertad; sin embargo siguen en libertad y trabajando.

El defensor José Castro asegura que las denuncias en contra de los investigadores están desde el 12 de junio del año anterior: "hay dos denuncias y dos querellas en contra de los cinco investigadores falsos".

Los defensores esperan que los agentes sean procesados luego de este resultado aunque lamentan que no se haya realizado antes.