Reingeniería en centros penales

Reos se mantendrán clasificados y uniformados dentro de las cárceles

El vicepresidente Oscar Ortiz informó que a los reos de baja peligrosidad se les asignarán trabajos forzados en instituciones del Estado.

El vicepresidente de la República, Óscar Ortiz, anunció que se iniciará una reingeniería en los centros penales del país. Adelantó que todos los privados de libertad serán uniformados y se mantendrán mezclados en los recintos penitenciarios. "En los próximos 120 días vamos a uniformar a todos los privados de libertad por nivel de peligrosidad", informó.

El director general de centros penales, Rodil Hernández, ahondó en esto y sostuvo que se hará una clasificación de internos dependiendo de su peligrosidad: alta, mediana y baja. Además que habrá un color para identificar a qué categoría pertenecen. Además sostuvo que los reos podrán pasar cambiar de clasificación en el tiempo, dependiendo de cómo se comporten durante su condena. "La clasificación ya no dependerá a su pertenencia o no a determinado grupo delincuencial a la que pertenecen sino de las características de cada uno de ellos", dijo. 
 
En cuanto al uniforme el funcionario explicó que esta medida tiene que ver un un primer nivel de readaptación de la persona, porque deberá someterse a reglas específicas y que entienda que ya no está en su comunidad o con su pandilla, sino bajo el control de Estado. "No tiene que ver con darle una ropa, una camisa, un color específico, tiene que ver con el hecho de que un privado de libertad a entrado a una institución bajo el control de Estado y tiene que hacer uso de esa vestimenta de acuerdo a las leyes", explicó. 

Por su parte, el presidente de la comisión de seguridad, Antonio Almendáriz, explicó que dentro de la reingeniería se está tomando en cuenta la sentencia de la Sala de lo Constitucional que declaró inconstitucional el hacinamiento carcelario. El legislador precisó que hay cerca de un 25% de privados de libertad que no tienen condena, por lo que deben tomarse medidas en este sentido. 

Hernández aseguró que hasta el momento en estos primeros tres meses de la aplicación de las medidas extraordinarias no ha habido ningún incremento al hacinamiento que se mantiene en el 327%, pero una vez se comiencen con la construcción de algunos recintos nuevos y se tomen otras medidas, esta cifra comenzará a bajar. 

Aseguró que luego de la reforma a la Ley Penitenciaria, se ha implementado ya la clasificación en las tres categorías. Por ejemplo, el caso de Ilopango ya lleva un 100%, Mariona lleva un 50% y Apanteos un 60%, por mencionar algunos.  

En este sentido, el vicepresidente Ortiz anunció que esto es parte de una reforma profunda al sistema penitenciario salvadoreño que busca controlar y volverse una verdadero espacio de readaptación. Además, recordó que está el programa de Yo Cambio que pasará a tener un papel más estratégico, la idea es que  los reos de baja peligrosidad se les asignarán trabajos de orden público a cambio de la reducción de la pena. Con esto se podrían beneficiar unos 10,000 privados de libertas, que representan cerca del 29%. 

Estos anuncios se dieron en el marco de la reunión mensual que sostiene la comisión de seguridad y combate a la narcoactividad con el gabinete de Seguridad y el vicepresidente de la República para dar continuidad y recibir un informe sobre las medidas extraordinarias de seguridad.