La desesperación por obtener ingresos llevó a un grupo de ciudadanos a colocar puestos improvisados de frutas y verduras en aceras del barrio Santa Anita, al sur de San Salvador, pese a las prohibiciones por la emergencia nacional.

Este jueves los comerciantes se instalaron con pequeñas tarimas de madera sobre las cuales colocaron frutas, verduras y huevos para venderlos a los ciudadanos que pasaban por él bulevar Venezuela.

Sin embargo, más tardaron en instalarse en parte de la acera cuando personal del Cuerpo de Agentes Municipales (CAM) llegó para decirles que no estaba permitido el comercio.

Los vendedores informales tuvieron que guardar la mercadería y el sector fue acordonado por los agentes municipales para evitar que volvieran a instalarse.

Ante lo sucedido, el alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, dijo que las ventas en las calles no estaban autorizadas durante la emergencia y advirtió con decomisar los productos si los comerciantes no acatan las disipaciones.

“No se han autorizado ventas en las calles, ni se darán permisos durante la cuarentena. Quien incumpla la disposición será retirado y su producto decomisado. Instamos a la aprobación del estado de emergencia que nos dé más herramientas para hacer cumplir medidas de prevención”, expresó el edil desde su cuenta de Twitter.