José Armando Paredes, de 21 años de edad, curaba el último año del bachillerato técnico en software del Instituto Nacional Albert Camus (INAC). Tras graduarse, soñaba con ir a la universidad y comprar su casa para hacer un hogar con su novia. Sin embargo, la delincuencia le arrebató la vida y todos sus planes. 

El joven tenía una relación formal con novia de 18 años, quien también estudiaba en el mismo instituto y pensaban hacer un futuro juntos. Ambos querían en un futuro continuar sus estudios superiores, comprar una casa, tener sus cosas y posteriormente casarse.

Esos sueños fueron truncados el lunes 13 de mayo a las 2:50 de la tarde, luego de que tres sujetos armados lo asesinaran a balazos frente a su novia en la avenida principal de la colonia El Refugio, municipio de Ayutuxtepeque cuando iba a dejar a la joven a su casa tras la rutina en el instituto. 

Una familiar de Paredes contó a El Salvador Times, que el joven usualmente salía de estudiar en el turno matutino en el INAC, abordaba un transporte colectivo hacia su casa junto a su novia, a quien siempre iba a dejar hasta la puerta de su casa. Ese día no fue la excepción. 

El joven salió de su casa y apenas caminó unos pocos metros para dejar a su novia, quien también vive en la zona, cuando fue asesinado. 

"Él no salía de la casa, pasaba sólo encerrado haciendo tareas en su computadora o viendo la televisión. Su rutina era ir al instituto en donde a veces realizaba sus prácticas y de ahí hacia la casa y viceversa", contó la familiar del joven.

Añade de que Paredes se había destacado bastante en los estudios, incluso señaló que actualmente todas las materias vocaciones que cursaba del módulo llevaba solo notas de diez. Agregó que la mínima nota que el joven sacaba era siete. 

La familiar asegura que era un joven que quería superarse en la vida, de hecho además de sus estudios había comenzado a trabajar con un familia y lo acompañaba en algunas ocasiones a instalar aires acondicionados en empresas y viviendas.

Se desconoce la causa de su muerte

La familiar contó a este medio que toda la familia se ha quedado sorprendida tras el crimen, ya que no tenía enemigos ni había sido amenazado por alguna persona. Por lo que aún no saben cuál fue la causa de su muerte.

El día en que lo asesinaron iba vestido con su uniforme de prácticas del instituto; una camisa gris y un pantalón negro. Paredes llevaba  de la mano a su novia, con quien ya hacía planes en el futuro de hacer vida juntos.

"La madre de él está destrozada al igual que los demás familiares, su novia no habla, ha quedado en shock después de lo que sucedió. ¡Qué Dios se apiade de las almas que hicieron esto!", exclamó la apesarada familiar. 

Los restos del joven fueron velados en donde residía y el entierro está previsto para este día en el cementerio general de Ayutuxtepeque.