Raúl Mauricio Campos González, de 42 años, fue condenado a 40 años de prisión por matar a su esposa mexicana, a quien conoció en Facebook y pensó que le era infiel.

La vista pública fue realizada el jueves en el Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres de San Miguel. Allí fue encontrado culpable por el delito de feminicidio agravado en perjuicio de su esposa y feminicidio agravado tentado en su hijastra de 12 años.

Con base en las pruebas presentadas por la Fiscalía General de la República (FGR), el juez lo condenó a purgar una pena de 28 años de cárcel por la muerte de su esposa y 12 años por el intento de asesinato de su hijastra.

El feminicidio ocurrió el martes 16 de julio del 2019 en unos terrenos ubicados en el cantón El Rodeo, municipio de San Agustín, en Usulután. Las víctimas fueron Marta Elsa Deloya González, de 39 años, y la hija de ella.

El reporte de la Policía estableció que la mujer con su hija se encontraban trabajando en un sembradío de frijoles cuando el sujeto llegó y se abalanzó sobre su esposa, a quien le asestó varias heridas con machete causándole la muerte.

La hija, al ver que su madre era agredida, intervino, pero Campos González la agredió con el machete y le provocó múltiples heridas y fue trasladada a un hospital en donde estuvo internada por 180 días.

Deloya González y su hija eran del estado de Veracruz, en México. Ella se dedicaba a vender pan y a cultivar la tierra, mientras que el agresor es un jornalero que trabaja eventualmente.

El agresor conoció a la mujer en la red social de Facebook y durante un año estuvieron en comunicación y se hicieron novios, posteriormente se casaron y decidieron instalarse en el país junto a su hija.

Investigadores de Usulután junto a policías de seguridad pública de San Agustín y Jiquilisco iniciaron la búsqueda de González hasta que lo encontraron y lo detuvieron en las montañas del mismo municipio el miércoles 17 del mismo mes.

La confesión de un asesino

Después de que fue capturado y presentado ante los medios de comunicación, Campos Gonzáles relató que le había quitado la vida a su esposa, ya que según él lo había traicionado ocho veces.

“Le quité la vida a mi esposa… es que ella me traicionó ocho veces, se me iba a dormir con un hombre en la noche y yo la perdonaba porque, como soy evangélico, tengo dos iglesias en San Agustín", expresó en esa ocasión el ahora condenado.

“Yo no quería hacer eso, ya me había separado porque el 9 de diciembre ella fue a denunciarme a la Fiscalía y a decir que yo le había violado a la hija, y eran mentiras porque la niña salió bien", confesó.

Aseguró que seguiría siendo pastor evangélico y que predicaría la palabra de Dios dentro de la cárcel.