Una clienta denunció al hotel "Las Hojas" Resort, ubicado en la playa Las Hojas de San Pedro Masahuat, por supuestamente haberla sacado a la fuerza de una de las habitaciones a media noche el sábado 9 de marzo. El enojo de la mujer inundó todas las redes sociales dejando mal parado a la administración hotelera, incluso pese a que la mujer luego borró todas las denuncias de sus perfiles.

El Salvador Times habló con el representante legal, Héctor Castro, para conocer su versión de los hechos y señaló que fueron un aproximado de tres horas de discusiones y maltratos por parte de la clienta. Como una salida al conflicto se le devolvió lo que había pagado junto con el cupón. 

Según la acusación, la mujer había adquirido un cupón a través de una empresa el cual le permitía hospedarse por una noche dentro de un búngalo con un máximo de cuatro personas. Cuando llegó al hotel ella se presentó con una quinta persona, y por no estar dentro de las normativas del cupón, tuvo que pagar $15 extra.Sin embargo, al requerir una cama para la quinta persona inició todo el problema, en el que incluso tuvo que intervenir la Policía. 

Aseguró que como uno de los hoteles más exclusivos del país nunca habían tenido este tipo de problema con los visitantes. En esta entrevista da detalles revela detalles del hecho que ha llegado a muchos a través de redes sociales. 

Una clienta asegura que fue desalojada a media noche de la habitación y que ya había pagado por eso, ¿qué es lo que pasó?

La huésped en cuestión se hospedó el sábado 9 de marzo en el hotel y había adquirido un cupón a través de una tercera empresa. El cupón era para cuatro personas y solo incluía el alojamiento de un búngalo de dos camas y ella se presentó con una quinta persona; ya hemos tenido casos como estos y lo que procede es el cobro de $15 adicionales.

Como a eso de las 8:00 de la noche la clienta llamó a recepción para solicitar una cama adicional, el empleado de recepción le respondió que el costo de la cama era de otros $15 lo que hizo que ella se exaltara y comenzó a insultar al empleado

El empleado llamó a una ejecutiva de reserva en San Salvador y ella platicó con la clienta para tratar de ayudarle, si es que había un mal entendido, pero siguió insultando y alegando que había hablado con alguien que no le dijo de cargos extras, se le consultó el nombre de esa persona y ella dijo que no lo iba a dar y siguió insultando a los ejecutivos.

Luego se presentó el personal de habitaciones, se le consultó si estaba todo bien y se podía ayudar en algo, pero ella ya estaba bastante molesta. No quiso hablar con nadie y solo dijo que tenía de familia a accionistas del hotel y que lo iba a reportar.

Los encargados de hotel no tuvieron más que salir y llamar al gerente de turno para tratar de tranquilizarla y ver si había la posibilidad de llegar a algún tipo de arreglo; dejarle la cama si fuera necesario sin ningún cargo adicional, pero cuando fuimos a ver la habitación se constató que el mobiliario estaba dañado, la ropa de cama también.

Ella seguía en su mismo tema, no dejaba de insultar, de gritar, hasta simuló tener un ataque de epilepsia, según el reporte. Ante esto y sin tener una manera de tranquilizar al cliente y a los huéspedes se procedió a llamar al 911 para mediar la situación.

¿En algún momento ella recibió un maltrato  por parte del personal?

No, ella no permitía que el personal le hablara. Después de haber sido insultados y maltratados los empleados mejor optaron por retirarse para no decirle nada. Es un poco difícil que ella diga que recibió un trato prepotente de nuestro personal porque no se le pudo hablar hasta que la PNC se presentó al hotel.

¿Qué intenciones habrá detrás de la denuncia de la mujer?

Lo que percibimos es que ella, de alguna manera, trató de burlarse de los empleados del hotel para salirse con la suya. Fingir un ataque de epilepsia, ultrajar al personal, todo esto era parte de lo que quería

Quería que no le dijeran nada.y los problemas se dieron  porque habían daños en la habitación. Fue ahí cuando nos dimos cuenta de que lo que estaba haciendo es descargando su enojo contra el mobiliario del hotel.

¿Qué objetos inmobiliarios?

Sábanas, colchones, ese tipo de cosas.

¿Qué tanto del daño se puede cuantificar?

Es un daño que implica cambiar colchones, ropa de cama, podríamos fijarlo en $300. Esto ha sido motivo de controversia por el hecho que las sábanas estaban manchadas con algo rojo que no sale y al parecer, es sangre. Eso ya no se puede lavar, hay que cambiarla. No sabemos cómo llegó, ni de quién sea. Había roto los colchones y por la actitud de ella denotaba que iba para más.

¿Cómo intervino la PNC?

Ellos se aproximaron al búngalo y trataron de tomar la versión de la clienta. Cuando pasó eso, lo que hizo ella fue exaltarse y decir que el hotel estaba tratando de hacer era intimidarla para que se fuera porque no iba a pagar $15 adicional por la cama.

Para los agentes, según platicamos con ellos, fue un poquito difícil porque la señora estaba muy alterada y tampoco daba mucho chance de mediar. Los policías llamaron al gerente de turno y la solución que ellos veían, ya que no estaba a gusto en la habitación ni en el hotel, era mejor que se le devolviera lo que había pagado y que dejara las instalaciones o que la empresa presentara una demanda por daños a la propiedad.

Cuando habla de retribución de dinero, ¿de cuánto estamos hablando?

La clienta canceló $15 por la persona adicional y lo que se hizo es que el cupón que ella llevó al establecimiento se le devolvió en físico. Se le explicó que nos habíamos contactado con la empresa que se lo había vendido para que le hiciera la devolución.

¿Han tenido experiencias similares?

Esta es la primera vez que nos pasa. Hemos tenido incidentes en los cuales hay clientes que hacen mucho escándalo, pero se ha logrado llegar a un acuerdo de tranquilizarlos, pero realmente es la primera vez que hemos tenido un caso como este.

¿Qué recomendaciones hacen para las personas que comprar estadía a través de una empresa?

Leer correctamente las instrucciones del cupón, consultar cualquier duda. Es lo más normal que con un producto así surja algún inconveniente, pues que den la posibilidad de entablar una conversación para llegar a un acuerdo.