• Diario Digital | martes, 19 de marzo de 2024
  • Actualizado 00:00

Reyes Magos ¿verdad o mentira?

Reyes Magos ¿verdad o mentira?

No es ilógico sostener que la intención de Mateo al incluir a estos personajes en la biografía de Cristo era la de hacernos ver que Jesús era un Salvador no solo de Israel sino del mundo, así como la posibilidad de salvación universal a través de él.

Lo interesante es que en los territorios que ocuparon Mesopotamia, Persia incluso Egipto región de donde proceden los visitantes de Jesús-niño el cristianismo nunca ha sido una religión mayoritaria.

Podría concluirse que si la Biblia pretende demostrar alguna conversión de paganos, sería solo de tres Reyes Magos, más no la de una civilización que sabemos pasó del Zoroastrismo al Islam.

Dejemos para la astronomía la respuesta a la pregunta de ¿por qué ninguna civilización recoge registro astrológico (como si hay del Haley) sobre el fantástico recorrido de una estrella que aparece en el oriente luego sigue hacia Jerusalén y finalmente gira al sur posándose sobre una casa, pesebre o cueva en Belén? Solo recordemos que Mateo es el único que lo menciona.

Centrémonos para este texto en otros datos que pueden llevarlo a una idea de lo cierto o falso de estos versículos sobre los Reyes Magos.

La visita y veneración de unos Magos de oriente que llevan al recién nacido regalos es una (entre otras) intención de demostrar que a pesar que en su tierra Judea nadie lo reconoce como Salvador del mundo los sabios de otras religiones mucho más antiguas (zoroastrismo) si.

Tanto evangelistas como Jesús nunca dejaron de gravitar en la esfera del judaísmo. Mateo o los discípulos de Pablo (que pudieron haber escrito este evangelio) introducen con este relato en la vida de Jesucristo un elemento que sumará aún más a la divinidad y predestinación de mesías del carpintero de Nazaret y para esto la manera de volver profético su evangelio es armonizarlo con el Antiguo Testamento.

Ya en el libro de Números encontramos al mago oriental Balaán hacer una profecía a favor de Israel pesar de haber sido solicitado para que los maldijese. Isaías y Salmos debido a la clase de regalos dados al Niño-Dios nos permiten identificar el origen de los Magos.

No hay que olvidar la aparición inverosímil en el relato –por única vez- de Herodes (¿El Grande; Antipas; Arquelao; Filipo?) como autor de un infanticidio masivo que es mínimamente imposible.

Si de matar a un bebe se trataba simplemente el Rey podía haber ordenado seguir a los Magos y ubicar el lugar donde yacía la Sagrada Familia o enviar tropas luego de la partida de tan distinguidos visitantes que no pasarían inadvertidos en un pueblito como Belén y sencillamente preguntar dónde habían estado y eliminarlo.

«Herodes el Grande» era impopular dentro del pueblo por no ser cien por cien judío además de aliado con Roma no es verosímil su actitud y acción en cuanto a que para asesinar al Niño-Dios se requería organizar una matanza de todos los menores de 2 años que inevitablemente despertaría contra él más repudio de las gentes.

Esta narración se contradice con lo que escribirá Lucas. Nada dice este evangelista del portentoso milagro natural de la estrella de Belén o de los Reyes Magos y menos de un holocausto de niños.

Por el contrario, mientras que Lucas narra que la familia huye hacia Egipto, Mateo sostiene que luego de los 40 días de nacido Jesús es presentado al templo para ser circuncidado y posterior a esto la familia regresa a Nazaret.

Luego de este milagroso y tumultuoso nacimiento muy similar a las condiciones adversas y prodigiosas que de Moisés narra el Antiguo Testamento según Lucas ni María, ni los habitantes de Nazaret o Belén incluso el tetrarca Antipas habían al parecer oído de aquel increíble nacimiento ya que no entendían al Jesús público.

Corolario:

Podemos resumir que esta es una historia teológica (no existe prueba histórica) que el evangelista o los pablistas que posiblemente la escriben encuentran en el Antiguo Testamento y traen al Nuevo para volver fehaciente el mesianismo de Jesucristo.

Me sumo a quienes sostienen que el relato de los Reyes Magos de Mateo es una copia renovada de pasajes del Antiguo Testamento para transmitirnos una enseñanza teológica no cierta.

Ha sido la suma del tiempo, animosidad y fanatismo monárquico de creyentes los que han ido incorporando la belleza estética que hoy posee esta celebración. Su número final y nombres: Melchor, Gaspar, Baltasar. Etnias: blanco, pelirrojo y negro. Origen: Arabia-Persia. Regalos y significado: Oro, (Jesús Rey) Incienso (Dios) y Mirra (redentor sufriente).

Feliz 2018