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Dios te salve Patria sagrada… porque los ciudadanos estamos muy ocupados tratando de sobrevivir

Dios te salve Patria sagrada… porque los ciudadanos estamos muy ocupados tratando de sobrevivir

El Informe de Flujos Financieros Ilícitos en Países en Desarrollo publicado por la organización internacional, Global Financial Integrity (gfintegrity.org) en 2015 nos presenta la primera oportunidad de medir el monto del daño al patrimonio del Estado salvadoreño por la corrupción, el lavado de dinero, la evasión y la elusión.

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El monto de US$17,437 Millones es el total estimado en 10 años desde 2004 a 2013 el cual supera la cifra de la Deuda Pública Total publicada por el Banco Central de Reserva a Junio de 2016.

 Cabe preguntarnos, ¿cómo se puede estar dañando el patrimonio del Estado por más de US$1,700 Millones al año sin que nadie lo detecte; sin que nadie lo investigue; sin que nadie ni siquiera lo discuta…?

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Coincidentemente, en noviembre 2015 las Naciones Unidas también publicaron el informe de la nueva Medición Multidimensional de Pobreza en El Salvador, analizando el resultado de los esfuerzos del Estado en los hogares salvadoreños luego de 24 años, más de dos generaciones, desde los Acuerdos de Paz en 1992.

Su conclusión es que más del 98% de hogares salvadoreños sufren de al menos una dimensión de pobreza, lo cual demuestra la naturaleza sistémica de los daños sentidos por la población.  Los daños a los hogares salvadoreños son claros ya que las diferentes dimensiones de pobreza coinciden con las 5 obligaciones constitucionales del Estado a ser entregadas a la ciudadanía para gozar de: la cultura, la salud, la libertad, el bienestar económico y la seguridad social.  La concluión es obvia, el Estado no está cumpliendo sus obligaciones constitucionales para con los ciudadanos quienes son el soberano de la república.

Por esa razón es que la ciudadanía (más de 50% por lo menos, de acuerdo con las recientes encuestas electorales) rechaza la política como algo sucio, reconoce que el Estado no le ayudará a sobrevivir y decide que solo dedicándose a la sobreviviencia día a día podrá asegurar la comida de sus hijos.  Mientras tanto, las cúpulas oscuras de los partidos políticos y sus financistas mantienen el yugo institucional que desvía el bien común para el beneficio de sus propios intereses y logrando, así, que los flujos financieron ilícitos pasen desapercibidos, no investigados y no ajusticiados.

Ese yugo institucional proviene de la potestad constitucional de que los diputados nombrados por las cúpulas oscuras sin ninguna representacion de sus afiliados y electos por sus votos duros (menos del 40% de acuerdo con las recientes encuestas electorales) y con las premeditadas intimidaciones de las pandillas para asegurar su resultado, son quienes disponen cuales personas se vuelven Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, Fiscl General de la República, Magistrados de la Corte de Cuentas y muchos otros entes contralores del Estado cuya misión edebería ser detectar, investigar y ajusticiar los abusos.

Pero otro actor ha entrado a esta historia y ahora ha tomado protagonismo en el día a día de sobrevivencia del ciudadano salvadoreño, se llama el crimen organizado.  La falta de transparencia de los partidos políticos, protegido por su propia Ley de Partidos Políticos escrita y aprobada en la Asamblea por ellos mismos ha significado que no están obligados a dar cuentas de sus financistas a menos que hayan dado permiso a ser revelados.  

En Guatemala se ha comprobado que el 35% del financiamiento de partidos políticos proviene del crimen organizado, lo cual probablemente es reflejado en la situación salvadoreña, aunque por ley nunca lo sabremos.  Sin embargo, ya existen al menos 5 diputados suplentes en juicio por involucramiento con el crimen organizado, el primero ya fue condenado a 15 años de prisión por lavado de dinero, dando validez a nuestra conclusión.

Hay mucho por hacer para rescatar al Estado Salvadoreño de las garras de los corruptos y sus corruptores, los criminales y los intereses mezquinos.  El único que puede aplicar la solución y retomar la finca perdida a los capataces mañosos que se la han tomado es ese que piensa que es el peón de la finca pero que posee un Documento Único de Identidad con la foto del verdadero dueña impresa en su cara; sin embargo, ese dueño está demasiado ocupado tratando de sobrevivir para salvar la Patria sagrada…