El progresista César Bernardo Arévalo de León, del partido Movimiento Semilla, ganó de manera indiscutible las elecciones presidenciales de segunda vuelta en Guatemala este domingo 20 de agosto por la noche cuando al cierre del escrutinio preliminar un total de 2,441,661 votos a su favor se impusieron a los 1,567,472 votos alcanzados por su adversaria Sandra Julieta Torres Casanova, del partido Unidad Nacional de la Esperanza.

Arévalo le sacó una diferencia a Torres de 874,189 votos. Los electores guatemaltecos se decantaron por la opción que ha prometido volver a Guatemala al rumbo de la lucha contra la corrupción. Arévalo obtuvo un 58.01 por ciento de los votos válidos, mientras que Torres se agenció un 37.24 por ciento.

Los números electorales, sin embargo, no son del todo alegres para el sistema democrático guatemalteco, ya que en esta segunda vuelta la participación electoral se desplomó de un aceptable 60 por ciento a un 44.9 por ciento en esta ocasión. Es decir, el nuevo presidente de Guatemala fue elegido en unos comicios de segunda vuelta en que participó menos de la mitad de la población apta para votar.

El padrón electoral para estas elecciones de 2023 en Guatemala fue de 9,361,068. En la primera vuelta se registró una participación, para la presidencial, de 5,557,273 electores. En la segunda vuelta, con el mismo padrón electoral, participaron 4,208,985 votantes.

Las principales promesas de Arévalo son atender las áreas de salud, educación, infraestructura y seguridad. En esta última se ha comprometido a reforzar a la Policía Nacional Civil y al ejército para combatir el crimen organizado y el narcotráfico y recuperar el control del estado.

El presidente electo de Guatemala recibió desde el domingo por la noche, con los anuncios de su victoria electoral, llamadas de felicitación y de acercamiento tanto del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, como del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, países con los que Guatemala tiene fronteras.