Un hombre de 60 años murió durante el funeral de su esposa al caer de siete metros de profundidad por pisar una tumba en mal estado, en un hecho ocurrido en un cementerio de Guadalajara, en México.

El periódico azteca Milenio informó que la víctima ya había sido advertida por el personal del camposanto de no pisar tumbas que estaban identificadas como peligrosas.

Un elemento del Cuerpo de Bomberos explicó que el hombre no acató las indicaciones y se paró sobre una tumba, por lo que el suelo cedió y cayó a una profundidad de siete metros, golpeándose de la cabeza.

“Desafortunadamente no hace caso de las medias de seguridad y la persona pasa por encima de una de las criptas bastante vieja, esta colapsa y se cae alrededor de siete metros al interior”, dijo el bombero a Milenio.

El personal del cementerio avisó a los Bomberos, Cruz Verde y Protección Civil, quienes llegaron y maniobraron durante varios minutos para tratar de llegar hasta donde estaba la víctima.

Cuando los socorristas lograron ubicarlo, se percataron de que tenía un golpe muy grave en la cabeza. Trataron de reanimarlo durante varios minutos, pero murió.

Un equipo del Ministerio Público llegó y determinó que la causa de muerte había sido un daño cerebral grave.