El presidente de Francia, Emmanuel Macron, vivió un insólito momento junto a su ministra de Ecología al ser interrumpido por su macota que se orinó en la zona donde ambos sostenían una reunión de trabajo.

De acuerdo a la cadena BBC, Macrón advirtió a la funcionaria sobre el comportamiento de su mascota "Y el perro está haciendo algo bastante excepcional".

Nemo, el labrador mascota presidencial estaba orinando en una chimenea del siglo 17, algo que no daban crédito todos los presentes en el lugar.

El hecho se registró en el Palacio del Elíseo, donde mantenía una reunión sobre inversiones con Poirson, Julien Denormandie, secretario de Estado de Cohesión Territorial, y Benjamin Griveaux, ministro de Economía y Finanzas.

Durante el tiempo en el que el perro evacuó, a la minsitra le surgió la interrogante si este es un comportamiento habitual en Nemo.

"No", respondía el líder francés. "Ustedes han provocado en él un comportamiento bastante inusual".

La BBC recuerda que este no es el primer incidente con las mascotas de la presidencia francesa, en 2013 se supo que un chihuahua y dos labradores del expresidente Nicolás Sarkozy destrozaron varios muebles históricos del Salón de Plata del Elíseo.