Un vigilante de un centro comercial en Australia fue condenado a cuatro años y medio de prisión por haberse aprovechado y agredido sexualmente a una niña de tres años quien se había extraviado en la zona de juegos del local.

De acuerdo con la cadena internacional RT, el hecho sucedió después de que los vigilantes del centro comercial detectaran por medio de cámaras de seguridad a una niña que estaba sola y angustiada. Uno de los elementos de seguridad acudió al auxilio de la menor.

Cuando el hombre llegó le dijo que ya sabía dónde estaba su madre, por lo que la iba a llevar con ella, pero en el camino tomaron un pasillo solitario y que no tenía cámaras de seguridad. Después de 11 minutos, el vigilante llegó hasta donde estaba la madre de la niña, se la entregó y la regañó por haberla dejado sola.

Ese mismo día, la niña le contó a su padre que cuando el vigilante la rescató le había hecho “bum bum” en la cara, el progenitor se preocupó y la llevó a la policía, para que la examinara un experto. El especialista le dijo a la policía que la niña había sido agredida sexualmente.

De acuerdo con las autoridades, minutos después de que el vigilante la rescatara, la llevó a una habitación del centro comercial y ahí se bajó los pantalones y le colocó el pene en la cara y posteriormente la tocó de forma inapropiada en su parte genital.

En los tribunales, el hombre identificado como Mohammed Al Bayati negó los cargos que se le estaban imputando, pero el juez lo condenó por el delito de agresión sexual en perjuicio de la niña.

“Es una pesadilla de cualquier padre… Tratar de comprender lógicamente por qué alguien intentaría comportarse de esa manera con una niña de tres años no tiene sentido”, dijo el juez a los medios de comunicación.