Judiciales - Santa Ana
70 años de cárcel para un hombre que mató con un cuchillo a su compañera de vida embarazada
El Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia y Discriminación para las Mujeres de Santa Ana condenó a 70 años de cárcel a un hombre que asesinó con un cuchillo a su compañera de vida en estado de embarazo.
El condenado es Óscar Armando Aguirre Flores, quien fue declarado culpable de feminicidio agravado, delito por el que recibió una pena de 50 años de prisión. Además, fue encontrado responsable de aborto sin consentimiento, con una pena de 10 años, y de fraude procesal, con otra pena de otros 10 años de cárcel.
Asimismo, se le impuso una condena civil de $50,000, informó la oficina de prensa de los Centros Judiciales.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía General de la República, los hechos ocurrieron el 22 de julio de 2024, cuando el imputado sostuvo una discusión con su compañera de vida, identificada solo como July, de 21 años de edad, en su vivienda ubicada en el distrito de Chalchuapa, departamento de Santa Ana.
Durante la disputa, el procesado tomó un cuchillo y causó heridas mortales a la joven, quien tenía siete meses de embarazo. Posteriormente, metió el cuerpo de la víctima en una maleta que envolvió con bolsas negras y lo trasladó en su vehículo para intentar borrar evidencias al lanzar el cuerpo a la quebrada que se encuentra a un lado de la calle hacia el cantón El Coco, de Chalchuapa.
Vecinos del lugar se dieron cuenta del hallazgo luego de percatarse de un bulto envuelto en bolsas negras que había sido lanzado a la quebrada, del que sobresalían la maleta de viaje y una figura que daba la impresión de ser los hombros y la cabeza de la víctima, de donde emanaba sangre.
El cuerpo de la joven fue localizado el 24 de julio siguiente. Tras las primeras diligencias, Aguirre Flores fue capturado mediante orden administrativa girada por la Fiscalía.
En el juicio, que se extendió por tres días, declararon más de una docena de testigos, quienes fueron claros y coherentes al describir la relación entre la víctima y el imputado, así como los abusos verbales y psicológicos a los que él la sometía. Además, una prueba de ADN confirmó que la bebé en gestación era hija biológica de Aguirre Flores.