• Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
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Judiciales - Homicidio culposo

Ebrio provoca que coaster aplaste a empacador de supermercado y hoy paga $5,000 a su familia para quitarse la culpa

En la audiencia, la mamá del fallecido se notó muy afectada por lo ocurrido. Por su parte, tanto la defensa y Fiscalía acordaron la conciliación por la cantidad de $5,000 dólares, por lo que el sujeto quedó automáticamente en libertad.

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Ebrio provoca que coaster aplaste a empacador de supermercado y hoy paga $5,000 a su familia para quitarse la culpa

Entre lágrimas y notoria afectación, la madre de Joel Mendoza, el joven de 21 años de edad que laboraba como empacador de un supermecardo, aceptó una conciliación económica con Jonathan Contreras Menjívar, el hombre que provocó la muerte del también estudiante de Bachillerato por conducir ebrio.

El sujeto de 32 años de edad tendrá que cancelar a la familia del joven un total de $5,000, tal como lo acordó en la audiencia inicial desarrollada por el Juzgado Tercero de Paz de Soyapango, en donde fue culpado del delito de homicidio culposo cometido el 20 de enero del presente año.

Según el relato de los hechos, Mendoza se dirigía junto a un compañero hacia el supermercado en donde laboraba, ubicado en el centro comercial Plaza Mundo. Ambos iban a bordo de un microbús del transporte colectivo de la ruta 3, que hace su recorrido desde la colonia Sierra Morena, de Soyapango, hacia el centro de San Salvador y viceversa.

Minutos después de que ambos jóvenes tomaron la unidad de transporte, Contreras Menjívar impactó con su camioneta la parte trasera del microbús, debido a que conducía en evidente estado de ebriedad, según testigos.

La víctima se encontraba sentada en la parte trasera del automotor colectivo, tras el impacto salió volando hasta caer en el asfalto, minutos después el microbús volcó y cayó encima del joven.

Mendoza fue trasladado hacia un centro hospitalario, pero por las graves lesiones murió antes de ser atendido por los médicos.

Cuando ocurrieron los hechos, el imputado se negó a que la Policía Nacional Civil (PNC) le realizara la prueba de Alcotest, por lo que no se pudo comprobar en la audiencia el estado de ebriedad en el que se encontraba y solo fue acusado por el homicidio.

El joven, quien era el mayor de tres hermanos, había optado por laborar como empacador, pues era el sostén de su familia. La madre de este no labora, porque está bajo tiempo de recuperación tras haber sido operada de su columna. 

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