Luego de haber sido procesado por el delito de violación agravada cometido en contra de una estudiante menor de edad, William Alberto Morales fue condenado a 10 años de prisión por el Tribunal Quinto de Sentencia de San Salvador, mismo que le impuso el pago de $600 en concepto de responsabilidad civil.

El imputado cometió la agresión sexual al aprovechar que era él quien trasladaba a la víctima a su centro de estudios, ubicado en el municipio de Soyapango. La madre de la afectada había contratado al imputado para que pudiera llevar a sus hijas a la escuela.

En la primera semana de mayo de 2017, Morales solo transportó a la niña, debido a que su hermana se encontraba mal de salud.

Luego de salir de la escuela, el imputado desvió su vehículo hacia el estacionamiento de un centro comercial de Soyapango, lugar en donde intentó por primera vez agredir sexualmente a la víctima, pero al ver que ella forcejeaba con él procedió a encender el carro nuevamente.

El sujeto volvió a estacionar el automotor cerca de un restaurante de comida rápida, donde la obligó -a través de violencia y amenazas de matar a su abuelo- a tener relaciones sexuales.

Ante esto, la madre de la víctima interpuso la denuncia el 11 de mayo de 2017, en las instalaciones de la oficina de la Fiscalía General de la República (FGR) de Soyapango, en donde tras las  investigaciones pertinentes se giró la orden de detención en contra del hombre.