El pastor evangélico Hulai Antonio Alfaro fue condenado 20 años de prisión por violar en reiteradas ocasiones a una menor de edad.

Alfaro enfrentó la vista pública en un Tribunal de Sentencia y fue encontrado culpable por violación agravada en menor, en modalidad continuada.

Los hechos ocurrieron en 2013 en el municipio en San José Guayabal, Cuscatlán.

Según las investigaciones, Alfaro se aprovechó de su posición de pastor de la iglesia y le pidió a la mamá de la víctima que la enviara  a su casa para que le ayudara en los quehaceres del hogar, y después abusó de ella.