Un taxista golpeó y amenazó de muerte dentro de una vivienda a su compañera de vida después de que la observara hablando con un amigo en un mercado en San Salvador. Ella durmió con sus hijos en la delegación por miedo a regresar a su casa.

Sofía (nombre modificado por seguridad) es vendedora de sorbetes y tiene tres hijos, dos de ellos con Juan H. con quien ha vivido 11 años. Él se dedica desde hace muchos tiempo a ser taxista y vive con ella en un pequeño cuarto de un mesón.

La mañana del 28 de enero de 2017 Sofía salió con sus hijos a vender sorbetes cuando de pronto apareció Juan en su taxi. En ese momento, ella estaba hablando con un amigo que vende mangos.

La mirada de Juan era furiosa y descontrolada, no le dirigió la palabra.“No sabes cómo te va a ir cuando llegues a la casa”, le mandó a decir con uno de sus hijos. Esto puso nerviosa a Sofía, ya que conocía el mal genio de su compañero de vida, pero prefirió no prestarle atención.

La relación de los hechos del expediente judicial señala que eran las 8:30, cuando en el pequeño pasillo de un mesón se desató una pelea entre Juan y Sofía, la cual  comenzó con gritos y posteriormente en golpes.

“¡Allá te vi con él, ”, le gritó Juan con un tono furioso e inmediatamente le propició una patada en el trasero que la llevó al suelo y continuó gritándole mientras la golpeaba. “No tengo nada que ver con él”, le dijo la mujer para que la agresión cesara, pero fue imposible.

“¡Vos sos una gran ofrecida, allá te vi con él!”, le repetía el hombre en la discusión. Su hija mayor al ver que su madre era golpeada se interpuso entre los dos y le exigió que dejara de golpearla; Juan no le hizo caso y la tomó por el cuello a Sofía.

 -“¡Mejor pégueme a mí y no a mi mamá!”, le gritó la niña.

-“Hoy si voy a matar a tu mamá”, le respondió el hombre enfurecido.

La niña decidió salir corriendo del mesón para llamar a la Policía. Cuando Antonio escuchó el sonido de la patrullas escapó por el techo de la residencia y dejó mal herida a su compañera de vida.

“Me pegó porque me vio platicando con otro vendedor. No nos ayudaba en la casa y me había amenazado con quitarme la carretilla de sorbetes para que no trabajara. Me golpeó y entonces lo fui a denunciar”, dijo a las autoridades mientras le tomaban su denuncia. Ella pidió a los agentes que la dejaran pasar la noche en la delegación porque tenía miedo de regresar a su casa, ellos accedieron.

Las agresiones contra su esposa no era el único delito que recaía sobre Juan, ya que fue acusado de hurto en el 2013 por el que fue procesado. La Fiscalía General de la República (FGR) le decretó seis meses de medidas para que no se acercara a su familia, pero fue después de la pelea que decidió denunciarlo por el delito de agresiones. 

El tribunal Sexto de sentencia de San Salvador instalará una vista pública prevista para el 24 de agosto de 2018 donde determinara la responsabilidad penal del sujeto por perjudicar a su compañera de vida.