Un vigilante de seguridad privada fue condenado a 10 años de prisión por haber intentado asesinar a un amigo policía con el que tuvo diferencias por el dinero que pagó por las cervezas que departieron en un bar del centro histórico de San Salvador.

La Fiscalía señala que el 24 de mayo de 2016, Víctor Alberto Lima López atacó por la espalda a Pedro R. a la salida de una cervecería ubicada sobre la avenida Monseñor Romero entre la 1ª y 3ª calle de San Salvador.

La acusación señala que Lima disparó en reiteradas ocasiones contra Pedro, luego de una fuerte discusión debido a que este aseguraba haber pagado más que su compañero con quien estuvo por varias horas departiendo.

Un soldado del Ejército que se encontraba cerca de la zona escuchó los disparos y vio a Lima López, quien al ser advertido verbalmente por este arrojó el arma sobre una cuneta para intentar despistar al efectivo militar.

Al verificar el estado de la víctima se constató que este presentaba impactos de bala en el hombro, espalda y rostro. Al encontrarse con vida fue trasladado a un centro asistencial en el que fue estabilizado.

Una patrulla llegó a la mencionada zona para verificar la situación alertada por el militar y terminó deteniendo a Lima López, quien en estado de ebriedad fue llevado a una delegación para iniciar el proceso judicial en su contra.

Al momento de la revisión las autoridades constataron que el vigilante no tenía un permiso vigente para portar arma de fuego y que del arma que portaba solamente presentó un carné que lo acreditaba como empleado de una empresa de seguridad.

En su defensa, el hombre intentó justificar que desde el año 1991 estuvo en control médico en el hospital psiquiátrico por trastornos mentales, mismo al que dejó de ir en el año 2015.

En un escrito brindado por el referido hospital se confirma la situación del vigilante privado. No obstante, alegan que al no haberlo tratado durante dos años, no se puede determinar si este padecimiento provocó su ataque.

La víctima, en tanto, quedó con una lesión permanente la cual le imposibilita mover su brazo de arriba hacia abajo y viceversa. Algo que le ha afectado en su trabajo.

Vigilante tenía abierto otro caso por haberle disparado a un compañero de trabajo

Pedro R. no atendió a los citatorios realizados por el Órgano Judicial en reiteradas ocasiones, por lo cual no se pudo contar con su declaración para ampliar los hechos relatados en la audiencia de vista pública.

Sin embargo, el juez a cargo del proceso determinó la responsabilidad de Lima López, a quien anteriormente habrían sobreseído por los delitos de intento de homicidio y amenazas con lesiones.

En 2014, Lima López fue detenido por las autoridades luego de disparar contra un compañero de trabajo por una broma pesada que le hizo este y que no soportó. El hecho se registró en el centro comercial La Unión.

El juez que lo condenó reveló que este otro proceso judicial se encuentra en la fase de Instrucción y que la parte juzgadora le decretó un sobreseimiento provisional al no tener las suficientes pruebas para pasar el caso a juicio.

El juez del tribunal Tercero de Sentencia consideró que la potación ilegal de arma de fuego y el homicidio en grado de tentativa valían para que Lima López pague una condena de 10 años de prisión.