• Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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Política - Ofensiva anunciada para agosto

Qué hay detrás de la intención del FMLN de reformar el artículo 240 de la Constitución

La dirigencia efemelenista anunció "una ofensiva" en sus intenciones de modificar la Carta Magna. Analistas creen que se trata de un mea culpa por reformar la Ley de Extinción de Dominio.

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Foto cortesía FMLN.
Qué hay detrás de la intención del FMLN de reformar el artículo 240 de la Constitución

El anuncio que hiciera la semana anterior el secretario del FMLN, Medardo González, sobre la intención de modificar el artículo 240 de la Constitución de la República ha generado diversas lecturas entre la población. En el abanico hay tesis que plantean que esta sería la llave para futuros cambios a la Carta Marga, pero también están los que consideran que el oficialismo pretende "lavarse las manos" luego de aprobar una reforma a la Ley de Extinción de Dominio en la Asamblea Legislativa.

En esencia, lo que pretende el FMLN es eliminar el periodo de prescipción (vencimiento) para el delito de enriquecimiento ilícito cometido por funcionarios, que actualmente es de diez años y que los funcionarios puedan ser procesados en cualquier momento en que se descubran visos de ilícitos durante su administración.

Literalmente, el artículo 240 -en el tema de prescripción- dice: "Los juicios por enriquecimiento sin causa justa solo podrán incoarse dentro de diez años siguientes a la fecha en que el funcionario o empleado haya cesado en el cargo cuyo ejercicio pudo dar lugar a dicho enriquecimiento".

El FMLN ahora pretende que no haya fecha de vencimiento para el delito contra la hacienda pública.

¿Qué hay detrás de la propuesta?

El FMLN impulsó hace dos semanas una reforma a la Ley de Extinción de Dominio que permitirá que a las personas que son investigadas no se le puedan expropiar sus bienes de forma preventiva, sino hasta que exista un fallo judicial que lo determine culpable.

La decisión se tomó yendo en contra de opiniones como la de la embajada de Estados Unidos y el fiscal general, que consideran que la medida es un retroceso en la lucha contra la corrupción en el país.

De lo anterior surge la pregunta, ¿por qué ahora el FMLN quiere reformar la Constitución en el apartado de enriquecimiento ilícito?, ¿hay un doble discurso del oficialismo?, ¿qué hay detrás de la propuesta?

Analistas políticos consideran que la maniobra del FMLN es para distraer a la opinión pública –e incluso la de miembros de su partido-  por las críticas recibidas por las reformas a la Ley de Extinción de Dominio, que dicen deja como gran ganador a ARENA.

Al hacer un estudio del momento en el que Medardo González regresa este tema al escenario, los analistas lo califican como una cortina de humo, puesto que una reforma a la Carta Magna es uno de los últimos recursos a tomar debido a lo complejo del proceso.

Félix Ulloa, presidente del Instituto de Estudios Jurídicos de El Salvador (IEJES), consideró que “para empezar Medardo González no tiene ni idea de cómo se reforma una Constitución, y además esto solo es un mensaje político y propagandístico para contentar a la base por la decisión tomada con extinción de dominio. No es una propuesta seria”.

Por su parte Eduardo Escobar, de Acción Ciudadana, calificó como “artilugio” la propuesta del Frente para reformar el citado artículo. “El FMLN quiere introducir el tema de reformar la Constitución al debate generado por las reformas a la Ley de Extinción de Dominio para distraer y descargar la responsabilidad de haberlas aprobado”, razonó.

Ambos analistas argumentan que la reforma al artículo 240 es innecesaria ya que “la ley en cuestión es un recurso de anticorrupción independiente, distinto y que no necesita depender de la Constitución y el plazo que lo establece”, aseguró Escobar.

En tanto Ulloa recordó que “hay una propuesta en el archivo de los diputados en la que solicitan que todo delito de corrupción sea declarado como crimen de lesa humanidad y para ello bastan 43 votos sin reformar la Constitución”.

El FMLN tiene los números para iniciar la reforma a la Constitución

Una reforma a un artículo de la Constitución requiere del concurso de dos legislaturas. En la primera, bastan 43 votos para reformar un artículo, y de ser aprobada, tendrá que ser ratificada en el siguiente curso, esta vez con 56 votos.

El secretario general del FMLN anunció el pasado miércoles que se tienen los votos necesarios para meter a debate y aprobar con mayoría simple –es decir 43 votos- la reforma. Bajo esta lógica, el oficialismo tendría amarrados los votos de GANA y al menos uno del PCN o a la diputada Claudia Ramírez, disidente de ARENA.

“Tanta alharaca que han hecho por eso (reformas a Extinción de Dominio), ¿por qué no reformamos la Constitución? Sumemos 56 votos y la reformamos”, retó González, quien anunció que luego de las vacaciones de agosto 10 diputados de su partido van a presentar la petición.

González también solicitó al fiscal general, Douglas Meléndez, que se sume a la petición que hará su partido para que de esta manera se le regrese los dientes a una ley que ha sido solicitada incluso desde Estados Unidos, aunque aclaró que “no vamos a esperar que nadie más se sume”.

“El FMLN no participó en la creación de esta Constitución”

De esta manera el partido de Gobierno estaría concretando lo que desde la anterior legislación viene amagando y metería a la mesa la reforma a la Carta Magna de la que en reiteradas ocasiones dice no sentirse parte.

Las principales voces del partido de izquierda en diferentes ocasiones han manifestado que “el FMLN no ha tenido participación en la creación de esta Constitución”, por lo que para ellos sería un sueño trabajar en modificar o crear una nueva.

Norma Guevara, Jackeline Rivera, Misael Mejía, son algunos de estas voces que dependiendo del tema terminan insinuando en algunos casos y en otros pidiendo de manera directa reformas integras.

Para algunos analistas, la reforma a este artículo dejaría las puertas abiertas para que más adelante se trate de modificar los apartados que hablan de temas polémicos como aborto, procesos judiciales, recursos hídricos y elección de funcionarios de segundo grado, todos ellos apetecidos por los dirigentes de izquierda.

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