La diputada y dirigente del FMLN, Lorena Peña, anunció que el secretario general del partido, Medardo González, está por anunciar lo cambios y medidas a tomar luego de la consulta interna realizada luego de la debacle en las elecciones del 4 de marzo.

Peña detalló que la consulta interna finalizó antes de las vacaciones de Semana Santa y que se presentó un informe al consejo nacional del partido para definir las medidas internas que se van a tomar.

“Sí se van a dar readecuaciones importantes, no solo en composición sino en la metodología para tener una mejor comunicación con el pueblo, sobre todo en los sectores más populares como el de la mujer y los jóvenes”, prometió la parlamentaria.

No obstante, la diputada descartó que se esté pensando en cambiar la secretaría del partido debido a que esto implicaría un degaste que considera es innecesario por la trayectoria de Medardo González.

“Medardo tiene victorias indiscutibles, como lo son los dos triunfos en la presidencia y conducir sin división la bancada legislativa del partido, haber estabilizado el trabajo del partido”, recordó Peña, quien estima que el FMLN debe de enfocarse en las presidenciales de 2019.

“No podemos pensar en meternos a una restructuración completa porque eso implicaría un proceso con grandes discusiones mientras ARENA eligiendo su candidato, tontos no somos”, remarcó Peña.

La vicepresidenta legislativa califica como una “barbaridad realizar una elección de autoridades del partido para llegar con un secretario que tiene que enfrentar una de las elecciones más complejas en la historia del país”.

A criterio de la diputada el cambio en la dirigencia se debe realizarse hasta que González cumpla con el mandato para el que fue ratificado aunque estima que “es muy poco tiempo el que ha pasado en la dirección, hay otros partidos que acumulan más experiencia”.

“Nosotros debemos de realizar nuestro proceso de readecuación que ya está establecido en nuestros estatutos, y que se da en cada elección”, remarcó Peña quien forma parte de la máxima autoridad del partido de izquierda.