Luis Reyes es una de las personas con mayor liderazgo dentro de la comunidad salvadoreña en Estados Unidos. 

Su cercanía con la política salvadoreña le han atraído una capacidad de convocatoria que resulta evidente para cualquiera que conozca del tema en la diáspora.

Por ahora, Reyes ha volcado su entusiasmo en apoyar la candidatura del alcalde capitalino, Nayib Bukele, con miras a ganas las presidenciales salvadoreñas en 2019.

En esta entrevista devela varios de sus motivos.

¿Quién es Luis Reyes?

Soy un salvadoreño humilde y trabajador que emigró a EEUU durante el conflicto armado de nuestro país. Llegué indocumentado —como lo hacen miles de compatriotas— a luchar por sacar mi familia adelante y con mucho esfuerzo, sueños, y sacrificio, pasando por todo tipo de posiciones en la industria de restaurantes logramos llegar a cumplir nuestro sueño americano.

Ahora soy un salvadoreño comprometido con los cambios positivos en nuestro país de origen, para que sea una nación progresista y con oportunidades para todos, contribuyendo a que los jóvenes no sigan emigrando por falta de condiciones y desarrollo

Su nombre suena como uno de los apoyos más importantes a la candidatura presidencial de Nayib Bukele. ¿Es así?

Nosotros hemos creado un grupo en EE.UU. que no vivimos de la política, pero que estamos cansados de apoyar a partidos políticos que solo se acercan a nuestras comunidades en EE.UU. a pedir apoyo en tiempos electorales y después vuelven a practicar las mismas políticas excluyentes de gobiernos anteriores. Por lo anterior, vemos en Nayib Bukele una nueva forma desinteresada de hacer política a beneficio del pueblo. Es por ello que estamos liderando este movimiento que está creciendo aceleradamente, apoyando al actual alcalde de San Salvador. Es un movimiento a partidario y pluralista con una diversidad de pensamientos, pero que confluyen en una sola meta: un nuevo El Salvador para todos.

¿Su movimiento va a financiar la campaña de Nayib Bukele a la Presidencia?

La diáspora tiene poder económico en EEUU, pero carecemos de poder político porque nuestros compromisos familiares son el doble de los compromisos que tienen en nuestro país.

Nuestro movimiento ya ha conversado esto con Nayib Bukele y vamos a contribuir económicamente con lo poco que tenemos, con contribuciones mínimas de todo aquel que se una a nuestro movimiento, pero nuestra voluntad es aglutinar a todos los salvadoreños en cada rincón del mundo a contribuir para desarticular de una vez por todas las dictaduras partidarias que han gobernado nuestro país desde décadas.

Nuestro movimiento no tiene la capacidad económica de los partidos políticos de nuestro país, pues ellos reciben la deuda política que vienen de nuestros impuestos y además millonarias donaciones que después se traducen en favores a pagar. Nosotros le apostamos más a la voluntad y a la conciencia que ya es hora de cambiar de raíz nuestro sistema político partidario y que el mandato lo tenga el pueblo, que en realidad es el que sufre cuando se eligen gobiernos que a la postre se vuelven más de lo mismo.

¿Quiénes conforman el movimiento Nuevas Ideas USA?

Somos un grupo de salvadoreños honestos honrados, somos humildes trabajadores que hemos experimentado en carne propia la pobreza y la exclusión y que nos hemos comprometido con cambiar el rumbo de nuestro país; y no me refiero a volver a los gobiernos de ARENA o a continuar con un nuevo gobierno del FMLN. El sistema político partidario ha fracasado en El Salvador. En nuestro movimiento, la mayoría somos pequeños empresarios del área metropolitana de Washington y otros Estados de la Unión Americana. Además, están involucrados sectores de académicos y profesionales, más importantes salvadoreños trabajadores obreros que se ganan a diario el pan de cada día y que saben que las malas políticas del país nos afectan directamente.

Queremos ser parte de las grandes decisiones políticas de nuestro país, y llevar nuestras experiencias en el ámbito laboral y empresarial contribuyendo al desarrollo económico de nuestro país. Recalcamos que no somos políticos, sino que nos mueve el amor por nuestro país y su gente.

Se ha mencionado mucho en otros periódicos digitales y en redes sociales a Walter Araujo y a Ricardo González (sobrino del secretario general del FMLN) como apoyo al Movimiento y a Nayib Bukele. ¿Es eso así?

Mire, de todos es conocida la simpatía de Walter Araujo con Nayib Bukele, pero quiero aclarar lo siguiente: la visita de Walter Araujo coincidió con la de Bukele, al igual que la de Ricardo González. Ellos no venían con la delegación del Alcalde de San Salvador ni pertenecen al movimiento Nuevas Ideas USA, como lo describí en la respuesta anterior.

Con Ricardo somos viejos amigos, pues somos o fuimos del FMLN; él se encontraba en la zona por otros motivos.

En el caso de Walter Araujo nos conocimos en un viaje anterior que hice a mi país y con él hemos entablado una amistad pues coincidimos en su nueva forma de pensar. Él vino invitado por un grupo de empresarios a disertar sobre materias electorales y fue invitado con gastos pagados, y a ambos los invité yo personalmente a los eventos donde participaría el alcalde y al festival salvadoreño donde nos tomamos fotos que fueron sacadas de contexto. Ambos no participaban en la agenda preparada para la visita del alcalde, todos los eventos fueron públicos y me acompañaron como mis amigos. Yo no tengo por qué mentir o esconder algo que no es cierto. Ellos no han tenido más participación que esa. Es lamentable que muchas cosas que sucedieron en la última visita del alcalde fueran distorsionadas y sacadas de contexto por cuestiones políticas o amarillistas. 

¿Usted estuvo apoyando mucho tiempo al FMLN y de hecho apoyó a Mauricio Funes en su campaña para llegar a la presidencia?

Sí. He apoyado al FMLN desde sus inicios, incluso desde antes de convertirse en partido político. Lo he considerado mi partido y lo respeto como institución política seria, pero no logró llenar las expectativas que nosotros esperábamos. Y no lo hizo, no porque no lo tenga en su agenda de proyecto político, sino porque en nuestro país el poder económico sigue por encima del poder político y los dos gobiernos del FMLN han caído en la trampa de la oposición de meterlos en el sistema de una dictadura partidaria donde se vela más por los intereses de un grupo pequeño y corporativo que las mayorías. En cuanto al gobierno de Mauricio Funes, sí lo apoyé con muchas esperanzas al igual que lo hice con el actual presidente Salvador Sánchez Cerén.

En 2009 se logró la transición democrática en nuestro país y la independencia de poderes del Estado. Eso es bastante, pero también ambos gobiernos han cometido muchos errores, se desconectaron con la realidad del país.

¿Como movimiento de la diáspora tienen ustedes propuestas concretas?

Tenemos propuestas comenzando por exigir cambios en la elección de cargos importantes de los tres órganos del Estado, dado que es desde ahí donde se inician las aberraciones políticas. También tenemos propuestas específicas en las áreas sociales, económicas y —lo más importante— en seguridad pública, que es lo más preocupante para nosotros en la diáspora. Todas estas propuestas serán presentadas al candidato que hemos decidido apoyar en las elecciones presidenciales. Estos y otros temas son de sumo interés para los salvadoreños que residimos en el exterior.

¿Cuál sería su mensaje final en esta entrevista?

El llamado es simple. Unirnos todos como hermanos, los que viven El Salvador y los que vivimos en el exterior sin importar a qué partido pertenecemos ni ideologías que solo han servido para profundizar grandes divisiones entre nosotros mismos. El llamado es a que lo que nos debe unir es el deseo de construir un país próspero, seguro, con oportunidades de desarrollo, donde emigrar sea una opción y no una obligación —como fue mi caso y el de la mayoría—.

El gran amor que le tengo a mi país es la fuerza que nos lleva a trabajar por el bienestar de nuestras familias y de futuras generaciones, llevando esperanza para nuestra gente, en especial los jóvenes.

Hago un llamado a unirse a nuestro esfuerzo y apoyar contribuyendo con lo que podamos, al final dólar por dólar o centavo por centavo vamos a lograr llevar a nuestro país por un nuevo rumbo.

Nuestro movimiento será permanente, en esta ocasión apoyamos las propuestas políticas de Nayib Bukele y aclaramos que no lo hacemos por intereses políticos, por cargos, ni por sacar provecho del Estado. Es por eso que nuestro movimiento ha puesto las condiciones necesarias para apoyar candidatos que tengan visión de país.