Cuatro de los seis nuevos directivos de la Asamblea Legislativa confirmaron a El Salvador TIMES que desde que han iniciado sus funciones dentro de la nueva junta directiva han reducido o eliminado el uso de vehículos y vales de gasolina que les confiere el nuevo cargo.

Los 14 diputados que conforman la junta directiva de la Asamblea Legislativa tienen asignados dos vehículos cada uno: una camioneta todoterreno, que es para el uso del diputado, y un pick up doble cabina, que le asignan para el personal del despacho del directivo y es usado para diligencias administrativas.

Hasta el 8 de noviembre, 11 de los directivos hacían uso de ambos vehículos. Los restantes lo hacían de manera limitada. Así, la vicepresidenta, Ana Vilma de Escobar desde el primer día en ese cargo renunció a ambos vehículos, al igual que la secretaria Jackeline Rivera se quedó con el uso de un vehículo. Posteriormente, el secretario David Reyes también devolvió sus dos carros, tras el escándalo cuando le prestó a su hermana un vehículo asignado a su persona para vacacionar.

Sin embargo, el discurso de austeridad y la crisis fiscal que está padeciendo el país ha comenzado a hacer cambios en el Órgano Legislativo, tras la llegada del nuevo presidente de la Asamblea, Guillermo Gallegos.

En este sentido, por ejemplo el secretario que suple a Reyes, René Portillo Cuadra, debería tener los dos vehículos. Sin embargo, aseguró ha renunciado a ambos. Además, informó no tomará los vales de gasolinas, no realizará viajes con fondos de la Asamblea y además rechazó el teléfono celular y los radios que se le asigna a cada directivo.

Aunque el Portillo Cuadra es el más drástico en su decisión, los otros tres directivos han renunciado parcialmente a sus beneficios.

Los nuevos vicepresidentes Rodrigo Ávila y Donato Vaquerano de ARENA, así como el secretario Francisco Zablah de GANA de los dos vehículos asignados que tienen solo se han quedado con uno, el pick up asignado al despacho.

Zablah explicó que se le han asignado dos pick up, pero ninguno de ellos va a ser manejado por él, solo uno de ellos quedará a disposición de la oficina para algún trámite administrativo y solo para ese vehículo se tomarán vales de gasolina. “Usted no me va a ver montado en un vehículo de la asamblea voy a andar en mi carro “, sentenció.

De igual forma, Ávila señaló que se le fue asignada una camioneta y un pick up. Sin embargo, solo ha dispuesto del pick up para uso de su despacho. “Yo tengo una camioneta igual a la que me entregaron, si me ven en una camioneta es la mía. Yo seguiré usando mi carro”, subrayó.

A su vez señaló que él hará uso del pick up para el uso que se ha estipulado de trabajo. Aseguró el problema es el abuso que se hace de los recursos, pero siempre y cuando se usen para el fin que tienen no hay mayor problema de usar las herramientas de trabajo que la Asamblea otorga.  “No hay que ser más papistas que el papa”, destacó.

Para el caso de Vaquerano confirmó que tiene asignado un vehículo y que hará uso de él. “Lo voy a tomar porque yo viajo todos los días a San Vicente, pues lo necesito. Solo en esa viajadera se me termina un vehículo en tres años que dura un periodo”, justificó.

Estos tres directivos aseguraron que solo utilizarán los bales de gasolinas asignados el pick up que han tomado.

La Asamblea otorga 33.5 galones mensuales por cada carro asignado. Así para los legisladores que tienen dos vehículos la asignación es de 67 galones para todo el mes. No obstante, estos tres directivos tendrán a su disposición solo los 33.5 galones.

El Salvador TIMES intentó comunicarse con los dos directivos nuevos restantes, Rigoberto Soto y Silvia Ostorga, para consultarles su decisión sobre los vehículos. Sin embargo, no atendieron la llamada.

Antiguos directivos mantienen sus prerrogativas

Por otro lado, a excepción de la efemelenista Jackeline Rivera, quien se ha mantenido toda la legislatura con un solo vehículo, los siete miembros de la directiva que mantiene su cargo no han cambiado ninguno de sus beneficios y continúan usando los dos automotores.

Así, por ejemplo, la primera vicepresidenta Lorena Peña continúa con el uso de la camioneta todoterreno, así como del pick up doble cabina. De igual forma, el actual presidente de la Asamblea, Guillermo Gallegos, también mantiene en uso su camioneta y el pick up designado para la presidencia.  

De igual forma, hasta el momento, no se ha informado que ninguno de los directivos del FMLN y del PCN, quienes no han sufrido cambios, hayan puesto a disposición vehículos o algunos de los beneficios como el celular, radios o los vales de gasolina.

Desde la llegada de Gallegos a la presidencia, una serie de cambios se han comenzado a evidenciar en cuanto al gasto y uso de recursos de la Asamblea Legislativa. Así, la primera decisión que tomó la nueva junta directiva fue eliminar el servicio de alimento gratuito en las comisiones legislativas.

Asimismo, se está buscando contratar un servicio de seguro médico mucho más limitado que el actual que implique incluso que los empleados y diputados tengan que hacer uso de la clínica del ISSS para tratarse enfermedades leves. Otro de los cambios es que se detuvo la compra de ocho vehículos nuevos, seis de los cuales eran para renovar la flota de vehículos de seis directivos.

Además, el nuevo presidente ha adelantado que propondrá eliminar el combustible gratuito para los directivos y jefes de fracción, quienes también tienen asignado vehículo de la Asamblea Legislativa.

Estos cambios orientados a la austeridad, surgen cuando hay duras críticas de la población al despilfarro de algunos funcionarios públicos en medio una crisis fiscal que aqueja al país. La semana pasada la Asamblea, además, aprobó una nueva Ley de Responsabilidad Fiscal que obliga al Estado a recortar el gasto corriente.