El presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén, inauguró esta tarde el XXII Foro de Sao Paulo en el Centro de Feria de Convenciones (CIFCO), ante la presencia del expresidente de Brasil Lula da Silva, quien envió un mensaje a los asistentes, vía video conferencia.

En sus palabras inaugurales, el mandatario se refirió a los magistrados de la Sala de lo Constitucional como "golpistas" y les anunció un fuerte combate a sus sentencia.

"Los golpistas no pasarán", dijo un Sánchez Cerén eurófico, a la vez que agregó que la Sala tiene como propósito enfilar el ataque en contra del FMLN.

También dijo que la Sala "se ha tomado el derecho de quitar y poner funcionarios".

En el mismo tono, el presidente arremetió contra medios de comunicación "afines a la oligarquía" de tener una supuesta campaña contra el programa Jóvenes con Todo, mediante el cual, se entregará un aporte económico a jóvenes que no estudian ni trabajan para que puedan participar de programas de formación y empleo.

El mandatario dijo que no daría marcha atrás con el programa, el cual requiere $150 millones.

En el encuentro participó también Adán Chávez, hermano del fallecido expresidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien en su discurso no dudó afirmar que en Venezuela el pueblo podría "tomar las armas" si fuera necesario, ante "el avance del imperio".

Cualquier vía es válida, no hemos abandonado las otras, pero si hay que tomar las armas en contra del imperio las tomaremos (Adán Chávez, hermano del fallecido expresidente venezolano Hugo Chávez)

"Cualquier vía es válida, no hemos abandonado las otras, pero si hay que tomar las armas en contra del imperio las tomaremos", dijo a los asistentes que lo ovacionaron con aplausos.

Sánchez Cerén acaba de llegar al país, luego de participar como testigo de honor en la firma de un acuerdo de alto al fuego entre el gobierno de Colombia y las FARC.

El Foro de Sao Paulo es el encuentro más importante de la izquierda latinoamericana y es la tercera vez que se realiza en el país. Inició el pasado jueves 23 con una serie de talles y diálogos a puerta cerrada, donde han participado unos 500 delegados internacionales de 103 partidos y organizaciones de izquierda de América Latina.