Autoridades de la alcaldía de Santa Tecla clausuraron el negocio "Donde Pepe", luego de comprobar que en el lugar se vendían bebidas alcohólicas sin permiso.

El alcalde tecleño, Roberto d'Aubuisson, explicó que los propietarios del negocio no pudieron comprobar que las denuncias hechas por los mismos vecinos eran falsas. Por lo que los acusó de violentar las normativas sobre el manejo del ruido y consumo de bebidas alcohólicas en lugares no adecuados.

De igual manera, señaló que pese a las advertencia no regularon ni reconvirtieron el negocio. "Lo que conviene es el cierre", sentenció.

"Estamos regulando la sana convivencia de los ciudadanos y los empresarios no hacen caso. Están a pocos metros de un colegio, de la Cruz Roja y de un parque al que llegan niños a hacer actividades recreativas", explicó d'Aubuisson,

De acuerdo a la delegada de la ordenanza municipal contravencional, Silvia Hidalgo, el procedimiento inició en el mes de abril cuando elementos del Cuerpo de Agentes Municipales (CAM) llegaron al negocio y les solicitaron los permisos para la venta de bebidas con un nivel menor al 6% -cervezas-, ya que encontraron a personas que estaban consumiendo en el lugar. Los encargados del negocio no tenían los permisos pertinentes.

Fue hasta en mayo que se decretó el cierre definitivo del establecimiento, luego de que los propietarios hubieran apelado ante el consejo de la alcaldía el fallo en el que se clausuraba el negocio.  

Este día los dueños del establecimiento fueron notificados del cierre definitivo y de la obligación de cancelar una multa de $7,047 por no tener la licencia de venta de bebidas alcohólicas. 

Según Hidalgo, la siguiente etapa es que los dueños interpongan un recurso en la Corte Suprema de Justicia (CSJ), si así lo estiman conveniente.

No obstante, si los dueños de este establecimiento no cumplen con la sentencia podrían ser encarcelados hasta con tres años de prisión por el delito de desobediencia a particulares. 

Para los dueños de este establecimiento, estas medidas son de carácter "político". Aseguran que ellos son trabajadores y que con la nueva administración les están cerrando la posibilidad de llevar el sustento a sus familias.

"Cómo vamos a tener los permisos, si ellos no los quieren otorgar, si ellos archivan cualquier solicitud que hacemos", sostuvo el encargado del lugar.

Por su parte, Hidalgo destacó que la finalidad última de la alcaldía es que se cambie el giro de esos negocios y que dejen de ser "chupaderos", porque alteran el orden público y la sana convivencia con los habitantes de las colonias aledañas.