Las calles del Centro Histórico de San Salvador lucen con menos basura de lo habitual debido a la poca presencia de ciudadanos, quienes a diario suelen tirar todo tipo de desperdicios.

Uno de los barrenderos municipales de la capital explicó a El Salvador Times que por lo general algunos ciudadanos tienen la mala costumbre de arrojar vasos y platos desechables, así como bolsas plásticas de las utilizadas para tomar agua.

“Ha disminuido, cuando las personas trabajan botan los desperdicios, pero hoy como está la cuarentena ha disminuido bastante”, explicó el empleado de la comuna capitalina.

Los únicos desperdicios que actualmente le toca retirar de las calles son los generados por los árboles cuando caen hojas secas.

“Como la gente permanece encerrada, no hay basura, solo las hojas que caen de los árboles”, comentó.

Desde su punto de vista, algunos ciudadanos tiran basura en las calles porque se niegan a utilizar los recipientes donde la pueden colocar.

“Creo que es necedad de ellos, el alcalde ha mandado a poner balancines, pero la gente no los utiliza”, se lamentó.

El hombre cuenta que lleva cuatro años barriendo las calles del centro de San Salvador y que tiene asignadas más de siete cuadras al oriente de la capital.

“La lógica del ciudadano es que para eso pagan impuesto para que se barra, pero ese es mi trabajo y no puedo renegar de el”, comentó.

No obstante, expresó que la ciudad tendría menos concentración de desperdicios si cada habitante hiciera conciencia de no dejarlos en las calles.

Según datos de la alcaldía, más de 400 cuadras conforman el Centro Histórico de San Salvador; para dejar las calles sin basura la municipalidad tiene más de 200 empleados dedicados a retirar los desperdicios.

En días como 26 de diciembre y 1 de enero la comuna recolecta más de 450 toneladas de basura del centro capitalino.