Ardor en ojos, náuseas y mareos son algunos síntomas que habitantes del cantón Apastepeque, en Alegría, Usulután, tuvieron la mañana del miércoles durante la apertura de un pozo geotérmico por parte una empresa dedica a la producción de energía eléctrica.

Personal de Comandos de Salvamento informó que fueron atendidas varias personas que presentaron problemas de salud, aparentemente, producto de la intoxicación generada por los gases que en ese momento se emanaban.

Ante lo ocurrido se activaron los protocolos de seguridad; no obstante, autoridades municipales informaron que no fue necesario evacuar a la población, pues al darse a conocer el evento se informó que no hubo necesidad de evacuar a vecinos.

Algunos afectados explicaron que no es primera vez que ocurre este problema y que en otras ocasiones también hubo afectados por los gases.

“La vez pasada yo fui uno de los que tuve síntomas de intoxicación y no me gusta casi ir a la Unidad (de Salud)... me sostuve, pero en realidad sí se siente en la boca”, expresó un poblador.

“Ni la vez pasada que fue más fuerte  se juntó tanta gente como ahora”, comentó otro ciudadano respecto a cómo vivieron ese momento.

El Salvador Times conversó con el jefe de la Unidad Ambiental de la alcaldía de Alegría, Mauricio Hernández, quien entre otras cosas descartó que se hayan tenido que realizar evacuaciones.

“Hicieron la apertura de un pozo —eso constantemente lo hace la geotérmica para desalojar gases y producir energía eléctrica —a nosotros como Unidad Ambiental siempre se nos manda una nota y lo que hacemos es ir y monitorear para que se haga bajo los parámetros normales de seguridad”, explicó.

“Fuimos a hacer esa inspección y si vemos que hay un problema entonces se suspende la actividad, pero cuando empezamos a ver que la emanación de gases estaba un poco molesta para la población entonces se suspendió tipo 11:30 de la mañana (...) se suspendió la actividad de la apertura de los pozos y ahí terminó todo (...) pero no sé quién hablaría a Protección Civil que llegaron y se activó todo el protocolo”, comentó.

Dijo que médicos locales llegaron y verificaron el estado de salud de los habitantes, de los cuales cuatro expresaron tener problemas de respiración, pero que no fue “nada grave”.

No obstante, el funcionario aseguró que en los protocolos internos no se meten, pero sí en los controles de ruido y monitoreo de gases.

“Ellos (la empresa) tienen sus propios protocolos y como unidad ambientales no podemos interferir en esas actividades porque son actividades técnicas...nosotros lo que hacemos es monitorear que los gases que emanan ahí y el sonido, porque se monitorean los gases H2F HCN. Lo otro es el ruido que no sea fuerte, tengo los datos de monitoreo que se hicieron ahí”, dijo.

Olor a huevo podrido

“Hay emanación de gases y se siente olorcito a huevo duro que es el ácido sulfhídrico y cuando se junta con el HCL entonces se hace un olor, que es lo que me imagino ocurrió ahí, y podemos decir que se sentía un poco fuertecito, pero como ya tenemos experiencia en ese caminar lo que hicimos fue cerrar la actividad”, mencionó.

La zona donde se pretendía abrir los pozos está a 1000 metros de distancia de donde se encuentran las viviendas; sin embargo, Hernández explicó que factores como la dirección del viento inciden mucho cuando los vecinos sienten con intensidad el olor de los gases.

Se le consultó al funcionario si estos gases son perjudiciales para salud de las personas y respondió: “Hay una tabla donde dice cuáles son los estándares permisibles hasta dónde puede llegar en esos aparatos, cuánto puede llegar en escapes por millón. La comunidad no lo va a entender, lo que se perciben son lo malos olores. Por eso nosotros es que pedimos siempre que se nos avisen porque al haber un problema como el que ocurrido ahora al haber un olor muy fuerte se suspende la actividad”. 

El protocolo de seguridad se activó, instituciones de Salud y Protección Civil llegaron al lugar.

Habitantes expresaron que sentían náuseas y mareos, Comandos de Salvamento brindó atenciones.